Estacionamiento medido: la Comuna denuncia e intenta desbaratar "un pacto entre trapitos y automovilistas"

Miércoles 24 Abril, 2024

Estacionamiento medido: la Comuna denuncia "un pacto entre trapitos y automovilistas"

Martes 27 de Septiembre de 2016 1

La Municipalidad sostiene que los conductores les pagan a los cuidacoches la mitad de lo que cuesta la tarifa comunal y, a cambio, los "trapitos" cargan una hora de estacionamiento cuando aparece el inspector.

La Municipalidad de La Plata intenta desarmar un acuerdo entre los cuidacoches de la zona de Tribunales y automovilistas que buscan no pagar estacionamiento medido, para lo cual realiza controles y operativos sorpresa para multar a los infractores. El "acuerdo ilegal" fue denunciado por un kiosquero "cansado de perder su porcentaje de ganancias por el cobro de la tarifa municipal".

El llamado de atención fue la queja del kiosquero de la zona, “el único que se quejó de los 160 kioscos que cobran estacionamiento medido”, contó a Infoplatense el director de Estacionamiento Medido de la Comuna, Jorge Estévez. “Es una zona de mucho conflicto, por lo que estamos buscando regularizar la situación. No sé por qué pero asumo que tiene que ver con que la gente que trabaja ahí siempre deja el auto en el mismo lugar y conoce a los trapitos”, opinó.

¿Cómo funciona el jeite? Según relató a este medio Estévez, los automovilistas llegan a la zona que abarca las cuadras de calle 46 entre 10 y 13, y aledañas, y dejan su auto en manos de los "trapitos". A las apuradas y en medio de un caos de tránsito, dejan los coches en doble fila, les dan las llaves a los tres cuidacoches que trabajan allí y les pagan la mitad de lo que les costaría abonar el estacionamiento medido, que llegaría a unos 70 pesos en una jornada completa.

"La persona arregla con el trapito, él no apura a nadie. Son todos conocidos, le dan hasta la llave del auto. Les cobran 30 o 40 pesos”, asegura el funcionario. Si en el transcurso del día llega a controlar algún inspector municipal, el chico (que previamente anotó la patente de todos los autos que le pagaron) corre hacia el kiosco y abona una hora de estacionamiento para todos los vehículos.

“El kiosco no está habilitado para cargar 20 patentes por persona. Menos al trapito que ya lo conoce”, relata Estévez. Pero el comerciante no piensa en la opción de quedarse sin la recaudación: por cada pago, se queda con el 10 por ciento. Aunque una sola hora, sólo cuando llegan los inspectores, tampoco es suficiente. Según detalla el director municipal, si en una semana el kiosquero gana una suma aproximada de 8 mil pesos por la tarifa, cuando aparecen los “cuidacoches” la cifra baja a 2 mil.

En ese marco, la Comuna se propuso desbaratar el convenio que –denuncia– perjudica la recaudación de la ciudad a través de operativos sorpresa. Además, se sumó la Dirección de Tránsito, a cargo de Carlos Falchi, para multar también a quienes dejaron su auto en doble fila. “Tampoco se pueden hacer operativos todos los días porque tengo que mandar 5 o 6 agentes y descuido otras zonas. Si mando menos los apuran”, afirmó Estévez.