Acto conmemorativo por los 100 años de la muerte de Almafuerte

Viernes 19 Abril, 2024

Homenaje a Almafuerte a un siglo de su muerte

Viernes 24 de Febrero de 2017

Las autoridades locales decidieron homenajear al poeta que adoptó nuestra ciudad y dejó un enorme legado cultural. 

Este 28 de febrero se cumplen 100 años de la muerte de Pedro Bonifacio Palacios, más conocido como Almafuerte, y la Secretaría de Cultura y Educación municipal decidió homenajearlo con un acto en el mausoleo erigido en su honor.

La conmemoración del 100º Aniversario del fallecimiento del poeta estará divida en dos partes: comenzará a las 10 de la mañana en el cementerio local, donde autoridades municipales e institucionales y el reconocido historiador Daniel Menafra le dedicarán unas palabras. Allí mismo, se colocará una ofrenda floral en su mausoleo y el Intendente de la ciudad, Julio Garro, descubrirá una placa conmemorativa.

La segunda instancia de este acto tendrá un traslado de escenario, ya que el público que presencie el homenaje se dirigirá a la sede del Museo (calle 66 e/ 5 y 6). En ese lugar, el actor Osvaldo Tesser ofrecerá una visita guiada titulada “Almafuerte, más que razones”; y el Secretario de Cultura y Educación, Gustavo Silva, anunciará la edición del sello postal conmemorativo por los 100 años del fallecimiento del poeta. En un trabajo conjunto con el Correo Oficial de la República Argentina S.A. se decidió poner en vigencia esta estampilla durante todo el año 2017.

El homenajeado

A pesar de haber nacido en San Justo, provincia de Buenos Aires, el 13 de mayo de 1854, Pedro B. Palacios es un hombre muy identificado con la cultura de nuestra ciudad, ya que se radicó en este suelo desde 1887 hasta su muerte, el 28 de febrero de 1917.

Se lo conoce como Almafuerte, el pseudónimo que alcanzó más popularidad de todos los que se utilizaron con él a lo largo de su vida, sobre todo en su época de periodista.

Tras la muerte de su madre, su padre lo abandonó y fue criado por parientes. Su primera meta fue ser pintor, pero una beca oficial que solicitó para viajar a Europa le fue negada y no obtuvo el éxito que esperaba. Tras este acontecimiento, se dedicó a la docencia y con apenas 16 años comenzó a dirigir una pequeña escuela en Chacabuco, donde en 1884, tuvo la posibilidad de conocer a Domingo Faustino Sarmiento.

Almafuerte dejó esta última ciudad para mudarse a La Plata y aquí trabajó en el diario "Buenos Aires" y luego dirigió el diario "El Pueblo". Desde su lugar como periodista alentó a los jóvenes de la época para luchar por sus derechos. Más tarde trabajó como empleado en la Legislatura y en la dirección provincial de Estadísticas. Tiempo después, descreído del poder, se aisló en su casa –hoy convertida en museo- y vivió rodeado de necesidades. El Congreso nacional decidió concederle un subsidio de por vida pero la ley llegó tarde, pues el poeta había fallecido en esos días, a los 62 años.

Para nuestra ciudad, el valor de su obra lo ubica como uno de los máximos referentes de la cultura local. Este docente, poeta y periodista, dejó un importante legado literario, parte del cual se puede descubrir en la casa que  Almafuerte habitó hasta su muerte, en la avenida 66, que fue transformada en Museo y declarada Monumento histórico de la Ciudad, la Provincia y la Nación.

 

¡Piu Avanti!

No te des por vencido, ni aun vencido,

no te sientas esclavo, ni aun esclavo;

trémulo de pavor, piénsate bravo,

y arremete feroz, ya mal herido.

 

Ten el tesón del clavo enmohecido

que ya viejo y ruin, vuelve a ser clavo;

no la cobarde estupidez del pavo

que amaina su plumaje al primer ruido.

 

Procede como Dios que nunca llora;

o como Lucifer, que nunca reza;

o como el robledal, cuya grandeza

necesita del agua y no la implora…

 

¡Que muerda y vocifere vengadora,

ya rodando en el polvo, tu cabeza!

 

De "Siete sonetos medicinales" Almafuerte.

 

 

“Si te postran diez veces, te levantas

otras diez, otras cien, otras quinientas:

no han de ser tus caídas tan violentas

ni tampoco, por ley, han de ser tantas”…

Almafuerte.

 

 

...“Soy el que puso paz en la discordia,

pan en el hambre, alivio en las prisiones,

y en la obsesión tenaz, más que razones,

puso sin razonar, misericordia.”...

 

"El Misionero" Almafuerte.