Los representantes de la empresa El Expreso SA que gestiona las líneas Este, 520 y 518, hoy paralizadas debido a que los choferes tienen tomado el predio donde se encuentran las unidades, en Ruta 11 kilómetro 8, hicieron una presentación judicial pidiendo la “libre circulación” de los micros. Con esta movida, la compañía busca desactivar la medida de fuerza que lleva dos días consecutivos dejando de a pie a miles de usuarios de la zona sur de La Plata. Los trabajadores reclaman la reincorporación de siete cesanteados, la mejora de las condiciones laborales (especialmente en los paradores) y la posibilidad de elegir delegados.

La instancia judicial abierta por la empresa, propiedad de Daniel Corvelli, fue confirmada a Infoplatense por la vocera de la compañía, Noris Sorgi, quien además desacreditó la actitud de los conductores asegurando que “no son más de 15 o 18” los que bloquearon toda la planta.

La voz de la empresa se escuchó este martes, en el segundo día de retención de tareas. Sorgi dijo que si bien  la compañía está dispuesta siempre al diálogo, en este contexto “es evidente que la actitud de este grupo de trabajadores no es la de sentarse a hablar nada si tenemos en cuenta que han tomado una medida extrema sin ningún consenso ni representatividad gremial”.

La presentación judicial, según informó la vocera empresarial, se hizo en el Juzgado de Garantías 1, de Guillermo Atencio.

Según la mirada empresarial, “la mayoría de los trabajadores” han hecho saber al gremio UTA, que es el que tiene representatividad en el sector, que no acuerdan con la acción. “Están impidiendo a la mayoría salir a trabajar”, dijo la vocera empresarial.

El trasfondo gremial está vinculado con una puja de una parte de los choferes que formaron la agrupación “El Bondi” con intención de disputar la interna ante el sector liderado por Oscar Pedrosa.

“Para la empresa es una situación de enorme impotencia –dijo Sorgi- sobre todo teniendo en cuenta que se atendieron los reclamos para mejorar los paradores”. Eso es negado por los trabajadores, quienes habían dicho a Infoplatense que los acondicionamientos fueron parciales.

Respecto de los siete despidos denunciados por los choferes, la empresa ratificó (tal como lo decían los trabajadores) que en cuatro de los casos fueron “no renovaciones de contrato” de conductores que habían sido tomados de manera temporaria para el verano.

 Y los otros tres “están justificados por inconductas reiteradas respecto a horarios, turnos  y a otras condiciones de trabajo que son normales en cualquier empresa de transporte”. Los trabajadores vienen sosteniendo que son choferes que trabajaban a reglamento “como lo hacen todos”, y que todas las cesantías están relacionadas con la vinculación de esos trabajadores con la agrupación “El Bondi”.

Esa posibilidad fue rechazada por la vocera de la empresa. “De ningún modo hay persecución, y tampoco es cierto que todos trabajaban a reglamento. De lo contrario eso sería muy evidente para los pasajeros, quienes lo hubieran manifestado de algún modo”.

Más allá de la presentación en la Justicia, que puede acelerar los tiempos, la vocera de la compañía aseguró que “es deseo” de los empresarios que “todo se resuelva a la brevedad para que los que quieren trabajar pueden hacerlo: La empresa tiene la mejor predisposición pero la postura es tan intransigente que va a ser difícil”.