A pocos días de cumplirse un nuevo aniversario del último golpe de Estado en Argentina, militantes de la Unidad Básica "Néstor Kirchner",  ubicada en calle 8 entre 61 y 62 y perteneciente a la Juventud Para la Victoria (JPV), denunciaron un ataque en la fachada del lugar por parte de grupos "fascitas".

Según advirtieron en un comunicado, en vísperas del Día Nacional de la Memoria, el lugar amaneció escrachado con la inscripción "24M, Día de la Venganza terrorista", firmado con las sigas "NN".  

Los militantes que pertenecen a este espacio político, del cual forma parte el ex Sub secretario de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires, Nicolás Carvalho, emitieron un comunicado expresando su repudio y considerando que este tipo violencia está motivada por “declaraciones de funcionarios del actual gobierno, repudiables en sí mismas y repetidas por los medios de comunicación".

A su vez, señalaron que este ataque busca "deslegitimar la lucha de las madres, abuelas y organismos de DDHH de los últimos 12 años, motivados por el temor de saber que las complicidades civiles, tarde o temprano, también tendrán que brindar explicaciones".

A continuación, el comunicado completo:

A horas de un nuevo aniversario del último golpe de estado cívico-militar, nuestra unidad básica “Nestor Kirchner” es nuevamente blanco de agresiones. Las pintadas, esta vez, se refieren al 24 de marzo como “24 M día de la venganza terrorista”, aunque para el resto de la sociedad es el Día Nacional de la Memoria, por la Verdad y la Justica.

¿Debemos aún explicar el recorrido de las últimas décadas que nos llevaron a este consenso?

Quizás sectores minúsculos de la sociedad lo necesiten. Estamos convencidos de que sólo representan una minoría.

La identidad de los agresores se esconde tras el símbolo “NN”. No conocemos su identidad política, aunque imaginamos su ideología y sus objetivos. En cambio, nuestros sueños y esperanzas están ahí plasmados en un mural que todxs lxs compañerxs nos esforzamos por mantener prolijo. Nuestra identidad está reflejada en esa pared que no se esconde, todos nuestros símbolos están ahí.

¿Qué significa entonces, en los tiempos que corren, este nuevo ataque?

Significa un reflejo del accionar de algunos funcionarios del actual gobierno, que emiten declaraciones repudiables en sí mismas y repetidas por los medios de comunicación. Declaraciones irresponsables que nos recuerdan la teoría de los dos demonios, que buscan deslegitimar la lucha de las madres, abuelas y organismos de DDHH, así como también las políticas de memoria, verdad y justicia de los últimos 12 años, motivados por el temor de saber que las complicidades civiles, tarde o temprano, también tendrán que brindar explicaciones.

Pero también, significa que aún nos queda un largo camino por recorrer. Significa que la historia es una batalla que debemos dar todos los días, porque un pueblo sin historia está condenado a repetirla. Significa una obligación con nuestro presente que se materializa en marchar este 24 de marzo junto a las madres, en exigir al Estado que continúe con las políticas de Memoria, Verdad y Justicia, y en mantener viva la lucha.

Por eso siempre reparamos nuestro mural, porque no nos doblegamos ante el discurso que pretenden instalar y no nos damos por vencidxs. Porque nuestra identidad está en esa pared así como también está en las calles marchando. Por eso marchamos el 23 de marzo en nuestra ciudad y el 24 de marzo en Plaza de Mayo, junto a las madres, las abuelas, los organismos de Derechos Humanos, los compañeros y el Pueblo.