Impulsan freno judicial al tren eléctrico hasta que haya un puente peatonal

Jueves 28 Marzo, 2024

Impulsan freno judicial al tren eléctrico hasta que haya un puente peatonal

Jueves 23 de Marzo de 2017

El retorno del ferrocarril Roca sigue siendo conflictivo. Ahora el padre de alumnas de una escuela de Pereyra pidió una medida cautelar.

El padre de alumnas que asisten a un colegio ubicado junto a la estación Pereyra del ferrocarril Roca presentó un pedido de medida cautelar al Juzgado Federal de Quilmes, a cargo del juez Luis Antonio Armella, para que las nuevas formaciones eléctricas no circulen hasta tanto no se realicen las obras que garanticen la vida e integridad física de quienes asisten al establecimiento. Concretamente reclaman un puente peatonal.

La decisión de acudir a la Justicia fue tomada luego de que las autoridades ferroviarias, que dependen del Ministerio de Transporte de la Nación, definieran avanzar con el paso del tren sin que las formaciones paren en esa estación.

El planteo se centra en que allí hay un cruce obligado de las vías para quienes asisten al colegio María Teresa Pereyra, que tiene una matrícula de casi mil alumnos en preescolar, primaria y secundaria.

Argumenta además que tampoco se dotó a la estación de andenes provisorios para que el tren pare, pese a que hay suficiente espacio para su colocación.

El vecino que hizo la presentación es Roberto Anselmino, su patrocinante es el abogado Marcelo Szelagowski quien subrayó:  “Se pide que se suspenda el tránsito del nuevo tren eléctrico entre la estación Pereyra y Constitución, hasta tanto ADIF y Ferrocarriles Argentinos, hagan las obras necesarias que otorguen seguridad a los transeúntes entre los que se encuentran las hijas del peticionante, quienes asisten a la Escuela María Teresa Pereyra y sí o sí deben cruzar el peligroso cruce ferroviario.”

Para Anselmino es “inconcebible e inaceptable la forma irresponsable y profesionalmente nula con que se encara la ejecución de las obras, que no tuvo ni tiene en cuenta la potenciación del peligro que existe en el lugar desde la época de los trenes diésel. Tendrían que haber realizado las obras en el verano. Ahora, de correr las nuevas formaciones eléctricas, éstas lo harían con mayor frecuencia, y al no parar en la estación pasarían a mayor velocidad, a lo que se suma que cerca hay una curva que no permite a peatones y conductores verse mutuamente”.

Para el vecino: “Esto es un combo para que desemboque en una tragedia. La vida de nuestros hijos es la que esta negligencia pone en peligro”.

Según comenta el padre, el Colegio María Teresa Pereyra hace años que viene reclamando un puente peatonal sobre las vías y que las autoridades ferroviarias cumplan con la “responsabilidad de velar por la integridad y seguridad dentro del territorio que les compete y que comprende todo el gran espacio que ocupa la vieja estación”.

En caso de prosperar el pedido, se sumará a otra complicación, que es el reclamo con cortes en la vía de los habitantes de Pereyra y Hudson, para quela formación se detenga allí. El impedimento es que los andenes aún no están adaptados para los nuevos vagones.