El ex fiscal Fernando Cartasegna, acusado de “falsedad ideológica de instrumento público" y de "incumplimiento de los deberes de funcionario público”, está en condiciones de declarar ante la Justicia por los cargos que se le imputan, según lo establecen los estudios realizados por peritos de la Procuración General bonaerense sobre su salud mental.

De esta forma, queda abierta la vía para que el fiscal Alvaro Garganta lo pueda citar otra vez a declaración indagatoria, trámite que había sido postergado el 12 de diciembre de 2017 porque la defensa de Cartasegna presentó un escrito, en el que indicaba que el imputado -ex titular de la UFI 4 de La Plata-, no estaba en condiciones de salud mental para comparecer.

Según revelaron fuentes judiciales, el informe perteneciente al cuerpo de peritos de la Policía Judicial de la Procuración General de la Provincia de Buenos Aires, indicó que Cartasegna “se presenta a la entrevista caminando por sus propios medios”.

“Se lo observa lúcido, orientado en tiempo y espacio; en adecuadas condiciones de higiene y con vestimenta acorde a su condición y medio. Mantuvo una actitud de colaboración durante la entrevista. Se expresó con un vocabulario adecuado, no denotando fallas lógicas ni contradicciones”, resaltó el informe.

Indicó que las expresiones de Cartasegna son ordenadas y coherentes y resaltó que el acusado “acompañó sus verbalizaciones con una resonancia efectiva displacentera, manifestando angustia por el proceso que actualmente transita”.

“La función sensoperceptiva se encuentra dentro de los parámetros de normalidad, no evidenciándose trastornos en dicha área. No delira ni alucina”, afirmó.

Concluyó que “de acuerdo a lo observado en la entrevista, el doctor Fernando Cartasegna se encuentra en condiciones para prestar declaración testimonial”.

Garganta había citado a indagatoria para el 12 de diciembre a Cartasegna a quien se le había iniciado un jury por diversos incumplimientos en la fiscalía de Trata y Pedofilia, pero luego renunció al cargo.
Cartasegna estuvo al frente de la UFI 4 de La Plata hasta el 3 de mayo último, cuando fue licenciado por la Procuración luego de ser atacado en su despacho, en lo que se sospechó que pudo ser una posible represalia por causas que investigaba.

Sin embargo, una auditoría realizada luego en su fiscalía detectó anormalidades en el funcionamiento de la dependencia, lo que motivó una denuncia penal ante el fiscal Garganta, que lo citó a prestar declaración indagatoria.