Luego del increíble espectáculo que brindara el año pasado, Monster Jam volvió a nuestro país con un show lleno de acción con los más exclusivos Monster Jam Trucks, como Earth Shaker, Max-D y toda la flota de vehículos motorizados más grande del mundo, incluidos los favoritos del público latinoamericano, como El Toro Loco.
Más de 50 mil personas se dieron cita y se emocionaron con las 2 presentaciones que estuvieron programadas para este fin de semana. Dentro de una pista armada con tierra sobre el concreto del Estadio Único de La Plata casi una decena de vehículos se batieron a duelo en carreras y realizarán trucos y vuelos que explotan sus particulares soluciones técnicas.
Los vuelcos y los errores conductivos (que suelen ser a baja velocidad) también dirán presente, pero a diferencia del automovilismo, aquí se pudieron festejar sin culpa y con la complicidad de los pilotos, que tienen un destacable sentido del show y una predisposición digna de admiración.
Más de 350 presentaciones en vivo cada año alrededor del mundo, shows llenos de movimientos, saltos, caídas llevan a Monster Jam al límite. Con 4 metros de alto y 4 metros de largo, los Monster Jam Trucks son máquinas con diseños personalizados que van sobre llantas de 1.60 metros de alto y con un peso total de 4.5 toneladas.
Los vehículos
Están conformados por estructuras tubulares y siluetas de fibra de vidrio, que pueden imitar la carrocería de una camioneta o la morfología de un animal para ganarse el apoyo de los más chicos. De esta manera, Monster Mutt luce como un dálmata enfurecido, El Toro Loco llama la atención por sus cuernos y Grave Digger (“El cavador de tumbas”), uno de los más tradicionales, recrea las formas de una van de 1951 con un trabajo de pintura envidiable. Todos poseen dos velocidades (la primera se usa sólo para arrancar de cero), marcha atrás y doble dirección, ya que el eje trasero puede usarse para virar más cerrado y magnificar los trompos o “donas”.
Construidos para explosiones cortas de alta potencia, los Monster Jam Trucks generan de 1.500 a 2.000 caballos de fuerza y son capaces de alcanzar velocidades de hasta 120 kilómetros por hora. Los Monster Jam Trucks pueden volar hasta 40 metros; esto es igual a 14 coches estacionados uno junto al otro, y hasta 10 metros en el aire.
Los motores Son V8 alimentados a metanol, con supercargador y cilindradas de hasta 9.4 litros. Se ubican en posición central (entre los ejes, por detrás del piloto) para entregar unos impresionantes 1.500 caballos de fuerza. Lanzan un verdadero estruendo con cada acelerada, que se engrandece dentro de la caja de resonancia que genera el Estadio Único.
Las ruedas Son las reinas del conjunto mecánico. Cuentan con un diámetro de 66 pulgadas y calzan cubiertas fabricadas exclusivamente para estas bestias (en los inicios se empleaban neumáticos para agricultura). Por cuestiones de seguridad (motivo por el cual se bloquearon las filas de asientos más cercanas al campo) están aseguradas a las camionetas con cables de acero. Pesan alrededor de 400 kilos cada una y llevan unas 23 libras de presión.
