Empezaron a levantar la casa para que Jade pueda dejar el Hospital de Niños

Miércoles 24 Abril, 2024

Empezaron a levantar la casa para que Jade pueda dejar el Hospital de Niños

Viernes 23 de Marzo de 2018

Es la niña que sufre una severa insuficiencia respiratoria y renal y no podía volver a su casa. A partir de una campaña solidaria encabezada por una voluntaria, dos empresarios anónimos pusieron el dinero para comprar una premoldeada. Alegría en la familia y mejora en ánimo de la niña.

Jade Moscoso, la niña de 3 años que padece un severa insuficiencia respiratoria y problemas renales, podrá cumplir en breve su sueño de contar con una "casa de verdad" que le permita vivir junto a su familia en condiciones más aptas. Dos empresarios respondieron a la campaña solidaria impulsada por Sandra Albornoz, una de las voluntarias del Hospital de Niños, y pusieron el dinero necesario para comprar y levantar una casa premoldeada que se supone estará lista este fin de semana.

La alegría de Sandra al contar la noticia es enorme y notoria. Envía a Infoplatense una fotos de cómo va quedando la casa con varios hombres trabajando. Agredace como puede a los benefactores que optaron por no revelar su identidad pero también a todos aquellos que en estos meses, desde que se decidió a hacer pública la situación de la niña y lanzar una campaña solidaria, aportaron su ayuda.

Se preocupa en rendir cuentas. "Habíamos juntado 35 mil pesos que los pusimos para ayudar en la compra. Pero la casa costó 160 mil pesos y el resto lo pusieron estos dos empresarios que nos mandó Dios", dice. Sandra y quienes se sumaron a la campaña habían recaudado ese dinero a partir de una rifa solidaria y a través de los aportes de dinero. 

Ahora habrá una nueva actividad para juntar fondos para equipar la vivienda ubicada en Olmos, en 52 y 187. Será el 8 de abril cuando el Grupo La Plata Solidaria (GPS) organice una comida solidaria. Será una cocina al disco de arado en La Comarca (44 entre 10 y 11). Quienes puedan colaborar pueden pasar ese día a partir de las 12 a comprar su vianda.

LA CASA

La vivienda donde vivirá Jade y su familia es una premoldeada de 40 metros cuadrados con dos habitaciones, cocina, comedor, una sala de estar y el baño, algo con lo que no contaban en la especie de casilla que habitaron hasta ahora.

Antes de encarar la construcción hubo una consulta con los médicos de la niña para determinar si la casa era apropiada. "Se llegó a la conclusión de que era lo mejor porque Jade podrá vivir ahí y la construcción es mucho más rápida", explica Sandra.

Además del agradecimiento a los empresarios, que también pusieron dinero para que sean obreros de la propia empresa proveedora de la vivienda los que la levanten, Sandra extiende la gratificación con Fabián Draghi, el papá de Luciana, otra de las voluntarias del Hospital, que se puso al frente de la coordinación de todo lo vinculado con la nueva casa.

También agradeció a todos los que se habían comprometido a donar materiales de la construcción a quienes ahora avisaron que la vía fue la de construcción en seco. Y a aquellos que también sumaron su aporte para ayudar a los otros chicos (Jade es la menor de 9 hermanos, siete de los cuales vivirán con ella en la nueva casa)

LA SALUD DE JADE

La noticia de que cumplirá el sueño de "una casa de verdad" levantó el ánimo de Jade quien parece más predispuesta a salir adelante pese a su complejo estado de salud. Se la nota mucho más animada según cuenta Sandra Albornoz.

Viene bien esta inyección positiva en medio de un cuadro de salud que sigue complicado. Ya le sacaron un riñón y en el que le queda le detectaron un quiste.

Desde hace casi dos años la niña es paciente crónica del Hospital de Niños. Fue sometida a diferentes terapias y operaciones con las que se intentó mejorar su estado de salud. Sin embargo, fueron pocas las ocasiones en las que pudo volver a su hogar, ya que las condiciones habitacionales eran extremadamente precarias y, en los momentos de mejoría, los médicos se rehusaban a darle el alta por considerar que volver a su casa traería graves consecuencias a su salud. 

Micaela y Cristian Moscoso, sus padres, trabajan recolectando frutas y verduras y en la mayoría de las ocasiones, "les pagan con verdura" y "muy pocas veces les dan efectivo". 

Por eso, para la familia era tan complicado conseguir materiales para arreglar su precaria vivienda o construir una casa nueva. Además, Micaela no puede realizar jornadas laborales demasiado extensas ya que, prácticamente, pasa todo el día en el Hospital de Niños atendiendo las necesidades de su hija.

Alcanzar la vivienda es un paso enorme para la familia. Pero quienes puedan sumar su ayuda para palear una situación que seguirá siendo difícil pueden comunicarse al 221-3549978.