Los platenses tendrán 3 únicas oportunidades para ver la destacada obra El Ardor, que inaugurará la temporada teatral 2018 de la Sala Armando Discépolo (12 N° 1473 entre 62 y 63).
Durante el 6, 7 (a las 21) y 8 de abril (a las 20), la pieza del autor bonaerense Alfredo Staffolani, dirigida por Luciano Cáceres, llegará a nuestra ciudad con entrada libre y gratuita (se solicita la colaboración de los espectadores con juguetes y juegos de mesa para ser entregados a hogares de niños).
Con un elenco integrado por Valentina Bassi, el propio Luciano Cáceres, Joaquín Berthold y Santiago Magariños, esta pieza que estuvo durante la temporada 2018 en Mar del Plata, recibió ocho nominaciones a los premios Estrella de Mar y resultó ganadora de: actor revelación, mejor autoría y mejor comedia dramática.
En cuanto a la obra, su creador, Alfredo Staffolani, precisó: "Nadie pudo hasta ahora escapar a su propio deseo; es así como 'El ardor' fue la expresión que apareció para pensar el impulso por el que su héroe adolescente justifica su rechazo por el modo de vida que sus padres esperan para él y mirar con ojos nuevos a un primo que hasta ahora ignoraba. ¿Cómo se puede vivir en un cuerpo que desea exactamente lo que tiene prohibido por su entorno?".
De qué se trata
Según la sinopsis oficial de esta obra teatral aclamada por la crítica, en el departamento donde vive Rita (Bassi) hace “un calor insoportable”. Ella es una maestra de apoyo escolar. También están Marco, un escritor de artículos de un diario poco leído (Cáceres) y Manu, su hijo adolescente (Magariños) que se encuentra en “pleno despertar sexual”. Si bien ellos planeaban un viaje a una casa en el Tigre para palear el calor del verano, se ven interrumpidos por la visita de Antonio (Berthold), un primo del Paraná, quien “revolverá viejas tensiones familiares”. Esta llegada inesperada es el puntapié para que Manu empiece dar a conocer algunos pensamientos que está experimentando y que, hasta ahora, habían sido desatendidos por sus padres. Por su parte, Rita encontrará “la punta del iceberg” de una relación que ya no le da lo que necesita, y Marco, advertirá que para sostener el vínculo con su mujer deberá restablecer algunos acuerdos que hasta entonces había naturalizado.
