Según los informes, el adolescente robó fotos de 13 estudiantes de su Instagram personal, las modificó para que parecieran desnudas y luego las difundió.

Las imágenes se difundieron ampliamente, llegando a varios colegios de la ciudad y a áreas circundantes. Incluso se informa que algunas de las fotos alteradas se utilizaron en estados de WhatsApp. Además de alterar y publicar las fotos, el acusado también agregó leyendas ofensivas a algunas de las imágenes y publicó una foto de su propio miembro.

Los padres de las víctimas, indignados, ya han tomado medidas. Han expresado su preocupación a las autoridades del colegio y han presentado una denuncia formal en la DDI. Según los informes, están decididos a que el acusado sea expulsado de la escuela.

Las víctimas tienen entre 13 y 15 años, mientras que el acusado tiene 13 años. En la denuncia presentada, se incluyen capturas de pantalla de las imágenes alteradas y las leyendas ofensivas que el acusado supuestamente escribió.

Varias de las chicas afectadas intentaron hablar con la directora del colegio, pero se les dijo que no podía hacerse cargo porque los hechos no ocurrieron en el ámbito escolar. Se informa que la directora solo pudo citar a los padres del acusado. Según los informes, el acusado no asistió a la escuela hoy, lo que lleva a los padres a creer que ha sido trasladado a otro colegio. La investigación continúa.