El concejal por el FpV, Gabriel Bruera, criticó a la actual gestión comunal del intendente Julio Garro y se defendió en relación a la investigación por coimas en la que se encuentra imputado su hermano, Mariano, junto a otros ex funcionarios de la gestión bruerista. En diálogo con un programa radial marplatense, el edil aseguró que “la ciudad tiene un retroceso en virtud de la nueva gestión". Y agregó: “Nuestra familia es perseguida”.

En un balance del primer año de gestión de Julio Garro como intendente de La Plata, Bruera opinó que “o no se adaptaron, o no sabían o no estaban preparados. Renunciaron más de cuarenta funcionarios a lo largo del año, no se acomoda el equipo y mucho menos la propuesta. Eliminaron todos los programas con obras y servicios para todos los barrios”.

Además, expresó: “Se sacó mucha gente talentosa de carrera, que sabía mucho de la administración municipal. Pero ellos no tienen un proyecto de ciudad. A muchos les parece sencillo que recolectar basura, limpiar y bachear es sencillo, pero parece que para esta gestión no es tan sencillo". “Cualquiera que vaya a La Plata puede ver el cambio que hubo en la pérdida de espacios públicos y también en seguridad”, continuó.

A su vez, el concejal disparó: “De todas las promesas de campaña no cumplieron ninguna”. “Cuando asumió el intendente Julio Garro yo tomé bien cuando dijo que se iba a hacer cargo de la seguridad, pero no se compró un solo patrullero, todavía están ahí las bicicletas que se licitaron”, dijo el hermano del ex intendente.

En relación a la investigación en la que se encuentra imputado su hermano, Mariano Bruera, junto a otros ex funcionarios sospechados de pedir dinero a cambio de rezonificar terrenos que serían utilizados - en su mayoría - para construir casa del Procrear, el edil aseguró que “fue entre el 4 y el 7 de enero, en diez días lo metieron en una causa vieja que no tenía movimiento con una jueza que es la mamá de un funcionario de Garro y una Cámara presidida por el suegro de un concejal que trabaja cerca de Garro. Casación consideró ese fallo de la jueza como un error grosero”.

“ Nosotros, mi familia, estamos acostumbrado a persecuciones así que no nos vamos a callar. Ojalá continúe porque queremos que nos investiguen porque no tenemos nada que esconder”, concluyó.