Trabajadores municipales de Berisso encabezan un paro que se extenderá por 36 horas. La medida de fuerza fue decidida por el Sindicato de Trabajadores Municipales del municipio costero, que resolvió el cese de actividades como modo de protesta ante el retraso en el pago de los salarios que, denuncian, viene siendo una constante en los últimos meses. El intendente Jorge Nedela, por su parte, advirtió que habrá descuentos para los empleados que no vayan a trabajar. 

Ya en el comienzo de la semana los trabajadores habían expresado su malestar en una jornada de retención de tareas que tuvo por consigna el reclamo ante el atraso del pago de los haberes correspondientes al mes de febrero. En ese momento, los empleados anunciaron que, de prolongarse esa situación, encabezarían un paro de 36 horas.

En este marco -y pese a que los salarios fueron abonados finalmente el martes a última hora- los trabajadores decidieron hacer efectiva la medida porque, dicen, desde hace al menos cuatro meses atraviesan una delicada situación. De ese modo, aunque lograron cobrar los sueldos correspondientes al mes de febrero, los empleados acordaron que la medida era una "respuesta" frente a los reiterados atrasos en los pagos y que no tenía "marcha atrás".  

El conflicto entre los trabajadores y las autoridades de Berisso comenzó hace meses. En las últimas semanas, el municipio se había comprometido a pagar los salarios dentro de los primeros cinco días hábiles del mes. Sin embargo, esa promesa no se cumplió y los trabajadores avanzaron con diferentes jornadas de retención de tareas que desembocaron en el paro.

Desde el Ejecutivo de Berisso, en tanto, advirtieron que el retraso de los depósitos está vinculado a la crisis financiera que atraviesa el municipio desde hace tiempo. En este sentido, el intendente Nedela expresó su descontento por la decisión de los trabajadores y advirtió que se aplicarán descuentos en los sueldos de los empleados que participen de las jornadas de paro.