Alumnos, padres y docentes de los distintos niveles de la educación que funcionan en la Escuela 23 de Villa Elvira, incendiada el 29 de octubre del año pasado, concentraron en las puertas de la Gobernación bonaerense, para entregar un petitorio y recrear con una maqueta el siniestro que consumió las instalaciones.

"Hace siete meses del incendio y nada ha cambiado" explicó a Infoplatense Rosario De La Mata, una de las profesoras del plan Fines que funciona en el lugar. Ese programa sigue funcionado con unos 200 alumnos en el sector del edificio quemado que se salvó de las llamas, pero en condiciones deficitarias, con baños químicos y separados del sector quemado por una pared durlock que en las últimas horas se desplomó poniendo en riesgo a quienes cursan (foto).

En tanto, el grueso de los alumnos que acuden al Jardín, la Primaria y la Secundaria que allí funcionan sigue concurriendo a las instalaciones de la escuela Santa María de Los Ángeles, lo cual representa una complicación porque les queda a 15 cuadras.

"Como ya nadie nos visita decidimos traerles la escuela acá, a la puerta de la gobernación, con esta maqueta. Y para entiendan lo que ocurrió recrearemos el incendio", explicó la docente poco antes de prenderla fuego, y mientras adentro referentes del establecimiento entregaban el petitorio reclamando que se activen las obras, tanto para que quienes siguen concurriendo al edificio de 601 puedan hacerlo en mejores condiciones, como para que el resto pueda volver.

En la actualidad, además de los problemas sanitarios estructurales que tiene la escuela, con baños químicos y sin luz en los patios, directivos y docentes remarcan que prácticamente no se ha hecho nada desde el incendio.  "Queremos denunciar que no se han acercado ni siquiera a poner una canilla y no tenemos ni siquiera agua", dijo Rosario, quien además contó que tampoco tiene gas, esencial para poder poner en funcionamiento el comedor.