a campaña por la reelección del presidente Mauricio Macri, acompañado por su candidato a vice Miguel Ángel Pichetto, costó unos 200 millones de pesos (sin contar las campañas locales, como la de María Eugenia Vidal en Provincia de Buenos Aires o la de Horacio Rodríguez Larreta en CABA, que en algunos casos contemplan gastos compartidos con Nación). Esta cifra cuadruplica la declarada por la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández de Kirchner, de unos 50 millones de pesos.

Aunque en algunas áreas como la de organización de actos de campaña, impresión de boletas o cartelería, los gastos de ambos frentes no están tan alejados (JxC reconoció 30 millones para cartelería y FdT 4, por ejemplo), la gran diferencia se explica por la inversión en campaña en redes sociales. El FdT gastó sólo el 10% del total en publicidad en Facebook, Instagran, Twitter, Google y Youtube, mientras que el oficialismo habría superado los 100 millones de pesos en este tipo de pauta, a lo que deben sumarse otros 21 destinados a pautar publicidad en distintos portales webs de medios de comunicación.

Desde el FdT sostuvieron que la “austeridad” de la campaña es una decisión directa de su candidato presidencial Alberto Fernández, que no confía demasiado en los “gurúes” electorales, no contrata muchas encuestas y no cree en la campaña en redes. La comprobación final de estas cifras se dará con la rendición de gastos de campaña ante la Justicia Electoral, un mes después de las PASO.

Con estas cifras se puede concluir que los 11.622.020 votos del Frente de Todos (47,65%) tuvieron un costo individual de 4,30 pesos. Mientras que los 7.824.996 (32,08%) de Juntos por el Cambio costaron 25.55 pesos cada uno, una cifra seis veces superior a la de su rival. Así la fórmula Macri-Pichetto gastó cuatro veces más en la campaña electoral que la de Fernández-Fernández, pero logrando que la inversión rinda mucho menos.