La candidata a gobernadora de Buenos Aires por Juntos Por el Cambio recorrió las instalaciones del Hospital Materno Infantil de San Isidro, que el Municipio construyó en conjunto con la Provincia.

Resaltó en particular la nueva guardia de 1.100 metros cuadrados, equipada con tecnología de última generación, que hacen del hospital en el centro sanitario de mayor complejidad del área norte.

Observó el Shock room, sala de espera, cocina, consultorios, boxes de internación: Vidal se detuvo a hablar en cada espacio con los profesionales y pacientes, y se sacó selfies con todos.

 “Cuando la gente me dice no nos abandones, les digo: yo elegí quedarme acá, no me voy a ir a ningún lado. Porque cuando digo que este es mi lugar, es mi lugar en serio, más allá de una elección. Y el 11 de diciembre puede ser que yo sea una mejor gobernadora, o una mejor dirigente”, afirmó.

Después de su visita al hospital Materno, Vidal y Posse caminaron el centro comercial de San Isidro. donde se repitieron saludos, selfies y una parada en la histórica panchería Coquito.

“Lo que no le voy a perdonar a Gustavo es que en todos estos años no me haya invitado nunca a comer en este lugar”, dijo María Eugenia Vidal.

Al término de la recorrida Vidal llamó a seguir trabajando de cara a las próximas elecciones: “Si vamos con esa actitud, y con el compromiso que demostraron ustedes en San Isidro, si le mostramos a la provincia que sí se puede, que San Isidro no es una isla, que la provincia puede ser como San Isidro, con un buen intendente, con un trabajo en equipo como el que hicimos estos años, entonces cada uno de nosotros va a seguir acá, demostrando que podemos”.

La gobernadora bonaerense instó a trabajar en equipo y a escuchar la demanda de los vecinos. “Nos dicen: nos abandonen, fuerza, no aflojen; así  que vamos a pelearla, vamos a darla vuelta”, enfatizó.