La medida incluye frutas y verduras de estación, y permitirá trasladar la reducción de precios al por mayor a las verdulerías de la ciudad, por lo que se espera que impacte de forma considerable en los valores de los productos que compren los vecinos.

De esta manera, la comuna logró fijar precios en frutas y verduras de los cuales se encuentra la papa, cuyo valor por bolsón de 18 kilos estaba en 450 pesos y pasó a 250 pesos; mientras que el tomate tuvo la caída más exponencial pasando el cajón de 18 kilos de 1.200 a sólo 200 pesos, con una baja que supera el 80% del valor.

También se acordó bajar el costo de la banana de 1.300 pesos el cajón con 18 kilos a 800 pesos; la manzana pasó de 1.400 a 700 pesos los 22 kilos por bulto; mientras que la lechuga pasara de 600 pesos a 400 pesos los 7 kilos por bulto.

Este acuerdo alcanzado entre el Municipio y los puesteros de venta de frutas y verduras, mantendrá los precios congelados hasta el próximo 10 de abril, cuando se prevé volver a revisar los valores, a los fines de analizar posibles oscilaciones en los precios al tratarse de productos de estación.
 

“Creemos que es imperioso poder trabajar con un estricto control de los precios, para evitar que haya abusos que afecten a los vecinos de la ciudad”, analizó el intendente Julio Garro, quien subrayó que “no vamos a dejar que se metan con el bolsillo de la gente”.

Según se detalló, el Municipio se encargará de dar cumplimiento al cuadro tarifario correspondiente tanto en el Mercado Regional como así también en los comercios de venta directa al consumidor para evitar que haya abusos en las subas.

Asimismo, anticiparon la posibilidad de crear un “protocolo informativo de precios” con el objetivo de regularizar el proceso de venta y resguardar al consumidor final. 

“A partir de la Ley de Abastecimiento 20.680 se estipuló un trabajo conjunto entre Nación, Provincia y Municipios para garantizar el abastecimiento de bienes indispensables y los precios dispuestos por el gobierno nacional retrotraídos al 6 de marzo”, indicaron autoridades locales.

Cabe destacar que, para garantizar el abastecimiento y controlar la modificación de precios durante la emergencia sanitaria por el COVID-19, la Nación dispuso que desde el 20 de marzo y por 30 días los precios de alimentos de la canasta básica, bebidas, artículos de higiene personal y limpieza mantendrán, como máximo, el precio que tenían al 6 de marzo pasado, lo cual se aplica para hipermercados, supermercados minoristas y mayoristas, minimercados, almacenes y autoservicios.

Para ello, el Ejecutivo puso a disposición de los consumidores un listado de ‘precios máximos’ correspondientes al 6 de marzo, para que los vecinos puedan constatar en https://www.argentina.gob.ar/preciosmaximos que su comercio cercano no está subiendo el precio de los productos.