Ayer, el Juzgado Federal n° 2 de La Plata, a cargo del Dr. Adolfo Gabino Ziulu, rechazó la presentación que habían realizado los dueños de un reconocido local gastronómico, ubicado en el centro de la Ciudad de La Plata, para que se cierre un perfil anónimo de Instagram mediante el cual se ensucia la imagen del negocio.
La noticia había estallado a fines de marzo y principios de abril, cuando un grupo de ex empleados lanzó la cuenta de Instagram y comenzó a postear imágenes a diario en las que se podía observar la suciedad de los sectores en los que se guardarían los alimentos, muchos de ellos sin cadena de frío.
También publicaron un video en el que se puede observar la presencia de un roedor en el local, además de las malas condiciones de los alimentos. “Las bebidas las conservan a la intemperie: el sol, la lluvia, el barro pegan de lleno contra las gaseosas y aguas que luego le venden al público”, manifestaron.
“No hay rotación de alimentos, no hay método PEPS, no hay quien controle. La comida se almacena toda en el mismo lugar sin tener en cuenta el riesgo de contaminación cruzada”, reclamaron indignados.
Los ex empleados del local no dejaron pasar la oportunidad para hablar sobre el maltrato laboral que sufrieron por parte de las dueñas del local, a quienes acusaron de prolongar jornadas de hasta 12 horas de trabajo, cuando pagan por 8. “Te dicen que todos los empleados son descartables, si estás enfermo o con problemas personales y faltás te echan”, agregaron.
Esta cuenta siguió publicando material frecuentemente a pesar de las amenazas que recibieron. En esta ocasión, la Justicia le dio un duro revés al establecimiento gastronómico, que no logró dar de baja al perfil que los acusa de ofrecer platos con alimentos en mal estado.