Quejas por el cambio de sentido de una calle en Gonnet

Viernes 26 Abril, 2024

Quejas por el cambio de sentido de una calle en Gonnet

Jueves 23 de Junio de 2022

Con el objetivo de agilizar el tránsito en la zona del Colegio Raíces, se cambió la mano de la calle 505 desde 25 hacia 31. Los vecinos reclaman porque la medida favorece únicamente a los padres que llevan a sus hijos al establecimiento y genera inconvenientes para el resto de las personas.

En los últimos días, la Dirección de Tránsito de la Municipalidad tomó la decisión de realizar una prueba piloto cambiando el sentido de la calle 505 desde 25 hasta 31 y restringiendo el estacionamiento sobre uno de los laterales.

Esta prueba se lleva adelante desde el martes y tendrá una duración de dos semanas. Cabe destacar que la disposición se aplicará en los horarios picos que tienen que ver con el ingreso y egreso de los estudiantes del Colegio Raíces y, en caso de que funcione de manera correcta, analizan instaurar la medida de forma definitiva.

Sin embargo, los vecinos de la zona se manifestaron en contra de lo propuesto por la Dirección de Tránsito argumentando que el barrio “es un caos” y que quienes viven en los alrededores del establecimiento educativo sufren las consecuencias del congestionamiento que se produce en los horarios pico.

Además, hay un descontento marcado por el hecho de que la Comuna no consultó la postura de los vecinos antes de establecer el cambio de sentido de la calle que, según comentaron algunos frentistas en comunicación con El Día, “favorece exclusivamente a los padres que llevan a sus niños al colegio”.

“Todo éste caos se realiza para que padres dejen a sus hijos en la puerta del colegio , cuando por las características del barrio, resultaría muy sencillo ordenar el tránsito si los señores padres dejaran sus vehículos a una o dos cuadras del colegio y acompañar a sus hijos hasta la puerta”, aseguró uno de los frentistas.

Quienes alzaron la voz explican que las características del barrio, con una gran cantidad de calles sin salida, obligan a los vecinos a tomar caminos alternativos desviándose hasta 1,5 kilómetros para poder llegar a sus hogares.