De acuerdo al trabajo llevado adelante por la consultora LCG durante el mes de enero, los alimentos sufrieron incrementos en torno al 5,5% en las primeras cuatro semanas del año, lo que permite prever que la inflación general del mes tendría un piso superior al 5%.

El estudio privado destaca que en la última semana los precios de los alimentos se desaceleraron respecto a las semanas previas. En lo que va del mes, se pueden observar aumentos del 9,5% en frutas, del 9% en verduras, del 7,1% en comidas para llevar, del 7% en lácteos y huevos, del 6,2% en bebidas y del 4,7% en aceites. Mientras que las carnes subieron en promedio un 2,5%.

Los datos difundidos por la consultora van de la mano con las proyecciones de EcoGo, que estima una variación del 5,6% para enero y de Orlando Ferreres que anticipó que la inflación volverá a superar la línea del 5%. La cifra oficial del Índice de Precios al Consumidor (IPC) la dará a conocer el INDEC el próximo 14 de febrero.

Estos indicios comprometen el discurso del ministro de Economía, Sergio Massa, que había planteado como meta reducir la inflación por debajo del 4% para el mes de abril. Si bien en noviembre (4,9%) y diciembre (5,1%) el índice se estabilizó, los pronósticos de las consultoras advierten un nuevo salto en el inicio del 2023.

Además, si la inflación alcanza la línea 5,5% significaría un duro revés para Massa, que a través de los acuerdos de precios estableció aumentos máximos del 4% en diferentes rubros. “La inflación a mi gusto todavía es alta. El objetivo es poner el tres adelante en abril”, había declarado el ministro en los primeros días de año.