El Ministro de Salud de la provincia levantó la voz de alerta sobre una inminente crisis económica que acecha a las clínicas privadas, en declaraciones a la prensa advirtió que estas instituciones "se están por fundir".

La situación se agrava debido al cese del programa Fescas, un subsidio otorgado por el gobierno nacional para cubrir parte de los salarios del personal de las clínicas. En el 2023, se destinaron $65.000 millones a este fin, abarcando entre el 30% y el 40% de los sueldos. Sin embargo, este apoyo llegó a su fin en diciembre del año pasado bajo la gestión del gobierno de Javier Milei.

Con el corte repentino de este programa, las clínicas se encuentran desamparadas, sumidas en un escenario donde las prepagas demoran hasta cuatro meses en pagar prestaciones. Esta situación se ve agravada por la inflación galopante y la necesidad urgente de recomponer salarios.

Kreplak no duda en señalar el rol de las clínicas en esta crisis, especialmente en su conflicto con IOMA, la obra social bonaerense. "Algunas clínicas alegan falta de pago por parte de IOMA, pero omiten el respaldo estatal que perdieron", afirma el ministro. Además, exigen la restitución de beneficios fiscales, como el decreto 478/2023, que eximía del pago de contribuciones patronales y cuya continuidad fue interrumpida por el nuevo gobierno.

En un intento por mantener a flote la actividad, se reclama también la reducción de las alícuotas del impuesto sobre los créditos y débitos bancarios. Rubén Matoso, representante de Fecliba, coincide en el diagnóstico sombrío de Kreplak, describiendo la situación como "muy complicada" y reconociendo el riesgo de cierre de establecimientos.

El escenario se torna aún más crítico en ciudades como Mar del Plata, donde la crisis de IOMA ha generado un impacto desproporcionado. En enero, tres de las principales clínicas suspendieron sus prestaciones, desatando la ira de los usuarios e incluso provocando incidentes en la sede del organismo.

Kreplak, quien llegó a Mar del Plata para liderar el Congreso Provincial de Salud, revela un preocupante aumento en el traslado de pacientes del sector privado al público. "Hemos observado un incremento significativo en la demanda de servicios de salud pública, con un porcentaje estimado entre el 30% y el 50%", declara el ministro. Este fenómeno refleja la cruda realidad de una crisis que amenaza con colapsar un pilar fundamental del sistema sanitario.