Comenzó esta lunes el juicio oral y público al ex comisario Luis Raúl Ponce, uno de los acusados de haber participado en el secuestro, tortura y asesinato del ensenadense Andrés Núñez, en septiembre de 1990. Tras mantenerse 22 años prófugo, el ex comisario afronta ahora cargos por "torturas y privación ilegal de la libertad", delitos que prevén una pena de reclusión perpetua.

Familiares y amigos de Nuñez, junto con la agrupación H.I.J.O.S y el Colectivo contra el Gatillo fácil, llegaron hasta las puertas la Sala de Juicios de la Cámara de tribunales (8 entre 57 y 58) para exigir justicia por Andrés y otros jóvenes víctimas de la violencia institucional.

Sus familiares resaltaron que "los tres poderes -ejecutivo, legislativo y judicial- fueron cómplices y encubrieron la muerte de Andrés" y advirtieron que hace 26 años esperan justicia. En este marco, pidieron "perpetua" para Ponce por considerarlo "un asesino y represor" y aseguraron que nadie los va a detener hasta que "todos los culpables paguen por lo que hicieron”.

El nuevo juicio (el segundo por el crimen de Núñez) intentará determinar la responsabilidad del expolicía Luis Ponce, quien formaba parte de la Brigada de Investigaciones. Él habría sido quien dio la orden para que un grupo operativo allanara la casa de la familia de Núñez en 78 y 119 de Villa Elvira, en la primavera de 1990.

El crimen ocurrió en el marco de un procedimiento ilegal, cuando una patota de la Policía, arrancó de su vivienda a Nuñez, el futbolista amateur que estaba en pareja con Mirna Gómez y tenía con ella una pequeña hija. Después de secuestrarlo este grupo de oficiales y suboficiales lo llevaron a la Brigada de Investigaciones de La Plata, en 61 entre 12 y 13, lo torturaron hasta que murió y lo hicieron desaparecer. Su cuerpo quemado fue hallado cinco años más tarde en un campo de la ciudad de General Belgrano, donde lo encontraron e identificaron posteriormente los expertos del Equipo Argentino de Antropología Forense.

Como se dijo, este es el segundo juicio. En 2010 la sala II de la misma Cámara  impuso la pena de prisión perpetua al ex sargento Jorge Alfredo González por privación ilegal de la libertad y torturas seguidas de muerte, y al ex cabo Víctor Dos Santos por el segundo de los delitos. Ambos eran integrantes de la Brigada de Investigaciones de La Plata, cuyo jefe era Ponce. En tanto Pablo Gerez, otro efectivo policial integrante del mismo grupo, se mantiene prófugo.

En este marco, durante la mañana de hoy, familiares y amigos de  Nuñez llegaron hasta del edificio para pedir justicia con pancartas y remeras con el rostro de Andrés y diferentes consignas contra la violencia institucional. En ese sentido, enfundaron la fachada del lugar con banderas y montaron, además, un pequeño puesto de venta de pines, remeras y calcomanías con el objetivo de dar financiamiento al Colectivo contra el gatillo fácil y "dar batalla" para que no haya "ni un pibe menos". Realizaron también una radio abierta en la que se escucharon testimonios del entorno de Nuñez, en los que relataron la lucha que llevan adelante desde hace más de dos décadas.