El Ministerio de Trabajo bonaerense dispuso la conciliación obligatoria en el conflicto que los empleados municipales de Berisso mantienen con el gobierno que encabeza el intendente Jorge Nedela. Así, obliga a los trabajadores a poner fin a las medidas de fuerza que llevan adelante desde hace 8 días, y tras lo cual el jefe comunal decretó la emergencia sanitaria por la falta de recolección de residuos y un aumento por decreto del 10% a cuenta de un futuro acuerdo.

Según informó la propia Comuna, la cartera laboral bonaerense calificó la situación como un “conflicto colectivo de trabajo”, en el que se abre una instancia obligatoria de conciliación entre la Municipalidad y el Sindicato de Trabajadores Municipales, ATE y UPCN.

Además se intima a las partes de abstenerse de tomar cualquier medida que pudiera significar una modificación en las condiciones laborales, como así también el cese de medidas de acción directa o indirecta que se hayan dispuesto.

El plazo de esta conciliación es de quince días y se establece una audiencia de conciliación en la sede de la Dirección Provincial de Relaciones Laborales del Ministerio de Trabajo para el día miércoles a las 12 horas. 

El conflicto se desató tras la marcha atrás dada por el Gobierno municipal a una propuesta de aumento del orden del 21 por ciento que había sido aprobada por los trabajadores en asamblea. La propuesta aceptada fue reformulada por la administración que conduce Nedela y el nuevo ofrecimiento, rechazado por los trabajadores. A partir de allí comenzaron las medidas de fuerza, que incluyeron paro total de 48 horas y retención de tareas con presencia en los lugares de trabajo.

Por la falta de recolección de residuos, el jefe comunal decretó la emergencia. Y por la misma vía otorgó un aumento del 10 por ciento a cuenta de la paritaria que, hasta el momento, permanece estancada.