“Bruera y Alak son el pasado”, afirma la dirigente peronista Victoria Tolosa Paz

Lunes 20 Mayo, 2024

“Bruera y Alak son el pasado”, afirma la dirigente peronista Victoria Tolosa Paz

Jueves 08 de Junio de 2017

La dirigente platense del FpV Victoria Tolosa Paz dice que los ex intendentes deben correrse y dejar lugar a la nueva dirigencia. Pide PASO a nivel local y vaticina unidad del peronismo a nivel provincial y nacional.

Locuaz. Muy locuaz. Tanto que habrá que interrumpirla una y otra vez para repasar conceptos. Madre de Bautista, Juana y Joaquín. Abuela de 13 nietos postizos. Peronista, 43 años. Prefiere la radio a la tele. Le gusta el teatro y al cine elige ir a ver una de amor. De Woody Allen. “Soy tremendamente romántica”, reconocerá, entre risas, la dirigente del FpV Victoria Tolosa Paz, sobre el final de la entrevista con Infoplatense, en el primer piso de la casona de Synergia, en 4 y 53. Se describe como una cultivadora de la amistad, con una vida social muy activa. Hace actividad física todas las mañanas. Corre por el country Grand Bell, donde vive. “Pero la política ocupa casi todo en mi vida. Es lo que me gusta hacer, no es una carga, lo disfruto”, afirma clausurando la conversación antes de salir disparada hacia una reunión. Política, claro. Una hora antes, desde el minuto uno de la entrevista transcripta más abajo, será un volcán de palabras encadenadas. “Bruera y Alak son el pasado”. “En la Ciudad debe haber PASO”. “Cristina es la única que tiene el termómetro real de lo que pasa”. “La ciudad está invivible”. Son sólo algunas de las definiciones que deja, junto a una evaluación de la gestión del intendente Julio Garro, a quien conoce desde los 14 años y pese a la distancia ideológica que –dice- los separa reconoce como un par. “Sigue siendo Julio Garro más allá del cargo, no viene de la pompa de la política”, concede.

-¿Qué la llevó a meterse en política?
-No es algo nuevo para mí. Hace mucho que estoy en la arena política, aunque con un perfil mucho más bajo del que tomé hace un tiempo.

-¿Qué busca? ¿Cuál es su objetivo?
-Desde que Cambiemos ganó la ciudad de La Plata un grupo de dirigentes, entrados en los 40 años, con muchos años de gestión pública, decidimos empezar a planificar una alternativa en la ciudad para 2019. Ese grupo me dio la venia para que sea yo quien lleve adelante la idea de un colectivo. Tenemos otra manera de hacer política en nombre del peronismo, en nombre del Frente para la Victoria.

-¿Cómo encastra esa nueva generación de políticos con la otra dirigencia, la histórica?
-Pareciera que en La Plata el peronismo no puede hablar de futuro. No sólo por lo que pensamos, sino por la manera de hacer política. Nosotros planteamos algo distinto. Ellos para nosotros son el pasado.

-Póngale nombres a ese pasado, por favor.
-Todos los que gobernaron La Plata son el pasado. Alak y Bruera son el pasado. Los dos. Fueron los principales representantes del peronismo local durante muchísimos años. Alguno ha hecho mejor tarea que otro, pero ya son el pasado. Cuando los veo caminar, recorrer la ciudad, me digo ‘es hora de que dejen aire a otros’; a quienes venimos con expectativas a querer demostrar que la política sigue siendo una herramienta espectacular de transformación no de los dirigentes sino de la gente.

-¿Cuál es la diferencia entre ambos?
-La diferencia es abismal. A veces me dicen ‘vos le tirás centros a Alak’. No. Él fue intendente con 32 años y tuvo al último gran equipo que pensó y planificó la ciudad. Creo que tuvo unos primeros ocho años de gobierno muy buenos pero los siguientes ocho no fueron buenos.

-¿Qué hace que un político se quiera quedar eternamente?
-Creo que el poder genera adicción. Acá estamos nosotros para hacerlo de otra manera.

-¿Debieran ser dos períodos como máximo?
-Cuando alguien se queda tanto tiempo en el poder pierde la capacidad de evolucionar. Bruera fue el peor intendente que tuvo la ciudad de La Plata desde la vuelta a la democracia. Empeoró todo, la calidad de vida de la gente, el acceso a la salud pública. La Plata pasó a ser una ciudad invivible.

-¿Qué mensaje tiene para esos dirigentes?
-El mensaje hacia aquellos que se quieren quedar enquistados es decirles que ya se les pasó el cuarto de hora, que llegó una generación que entiende la política con una dinámica distinta.

-¿Cómo es esa dinámica?
-Menos rosca de café y mucho más al lado del vecino para interpretar las necesidades que tienen. Hay que recorrer porque yo voy a hablar con los productores del cordón frutihortícola y los problemas de esa gente no tienen nada que ver con los que tienen los vecinos de calle 12 u otro lugar del casco.

-Dice que hay políticos que desconocen la realidad de la gente…
-Digo que esos mil kilómetros cuadrados que conforman La Plata, con realidades tan distintas, hay que abordarlos para comprender de qué se trata y se debe abordar de un modo muy distinto de cómo lo abordó la política en los últimos años en nombre del peronismo en La Plata.

-¿Es cierto eso de que está roto el vínculo entre la dirigente política y la gente?
-Sí. Se rompió. Cambiemos, decepcionando a sus votantes, complica aún más a la política, a toda la política. Hay cosas que puede y tiene que resolver un intendente. Por ejemplo, hay jóvenes que viven en la periferia que dejan de estudiar porque no tienen acceso al transporte público, porque el micro no llega y no pueden caminar 30 cuadras de noche para llegar a una parada. Entonces, por un lado tenemos la prestigiosa universidad que genera igualdad de oportunidades para todos y por otro, a pocos kilómetros, chicos que abandonan la escuela porque no pueden llegar. No puede haber un barrio desconectado de la ciudad. Alguien de Etcheverry tiene que tomar tres colectivos para llegar al hospital más cercano, que es el de Romero. ¿Sabe eso el director de Transporte? Dudo que lo sepa.

Tolosa Paz conoce a Garro desde los 14 años. Pertenecen a la misma generación política. ¿Qué puntos de contacto hay entre ambos? ¿Qué tienen en común? “Garro no es un tipo que venga con la pompa de la política. Es un tipo que puede ir al supermercado; no es el príncipe que gobierna la ciudad, con una corte que lo sigue. Eso lo reconozco. Julio Garro sigue siendo Julio Garro más allá del cargo. Pero del mismo modo digo que llegó al poder sin estar preparado. Ocupó cargos legislativos, fue concejal, fue diputado, pero esos lugares no tienen nada que ver con los cargos ejecutivos. La gestión pública es otra cosa.

-¿Qué cosas nota que tienen en común?
-Que fuimos adolescentes en los 90, cuando había un descreimiento muy grande sobre la política. Somos dos personas de poco más de 40 años que pensamos que hay que poner las patas en el barro y eso es muy saludable. Eso tenemos en común, pese a los intereses que él representa y lo que yo busco representar.

Tolosa Paz tiene 43 años y a los 25 ingresó al Estado. Subraya que no se convirtió en subsecretaria de buenas a primeras. “Fue todo un aprendizaje. Fui pinche, estuve en mesa de entradas en una dirección de trabajo social y a partir de ahí comencé a aprender”.

Afirma que el principal reclamo que escucha cuando camina los barrios es la falta de limpieza. Gorina, Los Hornos, Romero quedó bajo agua –dice-, y todo es producto de la falta de limpieza. La ciudad de La Plata está rodeada de arroyos y si no hay mantenimiento es imposible que no suceda lo que pasa, describe. Y se queja porque no ve “ni un cooperativista en lugares donde tendría que haberlos”.

-Están haciendo las obras sobre el Arroyo del Gato.
-Sí, todo bárbaro con el Arroyo del Gato. Pintan de amarillo, se sacan fotos. No es el único arroyo. Lo del Maldonado en zona sur es un desastre. Cómo no va a estar primero en la agenda del intendente y sí está la colocación de los buxus, unas ligustrinas divinas que están poniendo en las ramblas. Hay otras cosas antes de los buxus para que la gente viva mejor.

-El intendente cree que Esur funciona bien.
-Le doy la derecha pero en el casco urbano. Pero es totalmente distintos cuando uno pasa la 32, la 72. Hay mucha disparidad. Hay gente que gobierna sólo para el casco. Los Hornos es un ejemplo: viven 100 mil personas y el basurero sigue pasando sólo tres veces a la semana. Es imposible que la ciudad esté limpia.

-¿Cuáles son los problemas más importantes en la ciudad cuya solución está al alcance del intendente?
-La falta de infraestructura: falta de cordón cuneta, falta de asfalto. Los bacheos que hicieron estuvieron todos mal hechos. Un plan de bacheo en el que se gastó mucha plata pero estuvo mal ejecutado. Tal vez el maquillaje que hace sea mejor que el que implementaba Bruera, pero no sirve. Tenemos destrozadas, detonadas, las 1.600 manzanas que tiene el casco. Entonces, Garro, en vez de poner los buxus y los palitos, debiera haberse hecho cargo de la reconstrucción de todo esto, que es imperioso. Las veredas peor no pueden estar. El frentista tiene la obligación de cuidar las veredas, pero si durante años pasó ABSA o Camuzzi y dejó las veredas rotas y la Comuna jamás obligó a las empresas a enmendar lo que rompieron cómo luego pretenden que el vecino haga su parte. Eso es desidia municipal.

-¿Es posible que el peronismo vaya unido a las elecciones?
-Es posible si los que ya tuvieron la responsabilidad de gobernar y la gente le dio la espalda dan un paso al costado. Hablo de los Bruera específicamente.

-Cuesta creer que Bruera sea todo el mal del peronismo, que sólo allí radique la diferencia entre unirse o no…
-Bruera le hizo mucho mal al peronismo. Es un apellido que tiene un peso muy negativo dentro del peronismo. No hay ninguna encuesta que no le dé menos de 30 % de imagen negativa. Lo mismo que a Garro.

A contramano de lo que añora Tolosa Paz y algunos otros dirigentes del peronismo platense, el bruerismo ya está en campaña. En ese marco, la dirigente propone que se diriman los tantos en internas, “en las famosas PASO, que para eso existen”, dice. Y aclara que habla de internas a nivel local porque en el plano bonaerense y nacional “va a haber unidad”. “Creo que finalmente Randazzo se integrará a la unidad”. “Creo que la mayoría de los dirigentes del peronismo local pensamos, pese a que algunos no lo dicen, que Bruera termina siendo una ‘pesada herencia’ para el movimiento”.

-¿Por qué, entonces, el peronismo terminó apoyándolo en la elección pasada?
-Los peronistas somos orgánicos. Es la verticalidad. Cuando Bruera se convirtió en el candidato fue difícil, pero había que participar. No sirve la queja. Finalmente, creo que el peronismo no fue a la elección pasada con sus mejores candidatos. Y por eso perdimos.

La dirigente dice tener sensibilidad y ser “muy irreverente ante la injusticia”, y que la política es la herramienta para hacer una sociedad más justa. “Por qué algunos nacemos en un contexto que nos favorece, tenemos la escuela a 6 cuadras, vamos a la universidad, y otros no tienen acceso a nada de todo eso. Eso se cambia con la política. Eso me mueve a hacer política”, argumenta.

-¿Quiere ser diputada?
-No lo sé. Voy a ser lo que mi partido disponga de mí en términos electorales. Estoy acá para reconstruir el peronismo, trabajar para que gobernemos en 2019 que es el gran objetivo.

-¿Prefiere un cargo legislativo o ejecutivo?
-Sin dudas que lo mío es el ejecutivo. Soy muy ejecutiva y tengo mucha experiencia en eso. La gestión ejecutiva tiene resultados mucho más inmediato. Soy una persona de acción.

-¿Qué opina de Scioli?
-Scioli terminó su camino cuando perdió la elección. Puede acompañar, pero no puede protagonizar la etapa que necesitamos para volver a enamorar al electorado. Creo que la sociedad le reconoce, no obstante, que dijo muy claramente lo que iba a hacer el gobierno de Macri y no se equivocó: ajustar.

-¿Qué representa Cristina para usted?
-Cristina es quien ejerce la oposición y creo que puede ser candidata. Es quien ejerce el rol de principal opositora. Muchos no toman dimensión todavía de la talla de la ex presidente como dirigente político.

-¿Dónde radica la fortaleza de Cristina?
-En saber para qué hace política y para quién. Nunca tuvo dobleces. Jamás tomó una decisión que fuera en contra de las mayorías.

-¿Si se le saca la política a Victoria Tolosa Paz, qué queda?
-Queda una madre; aspiro a ser una gran madre y una gran abuela. Tengo 13 nietos postizos y dedico el tiempo libre que tengo a cubrir ese rol que me ha puesto la vida de abuela joven.