Juan Carlos Baglietto y Lito Vitale fueron las presencias estelares en la inauguración del Teatro Metro, la nueva sala que se abre a la ciudad como opción cultural en el espacio que pertenece a la AMIA, en 4 entre 51  y 53. Fueron protagonistas de un show contundente ante un auditorio repleto, satisfecho por escuchar el repertorio clásico del trovador rosarino. 

El telón se levantó con una ceremonia previa que incluyó un vino de honor, que contó con invitados especiales. También una presentación de Juan Pablo Skrt y el propio Carlos Mancinelli, uno de los impulsores del Teatro, con un tema cada uno. Y palabras de bienvenida a la que se sumaron Gerardo Tempesta, el otro promotor del proyecto, y el productor de espectáculos Carlos Rottemberg.

La platea, el pullman y el súper pullman estában repletos, con gente parada incluso, cuando Baglietto entro en escena para descargar el primer clásico "Dios y el diablo en el taller". Fue un show compacto, de una docena de temas que incluyó un set con algunos tangos y dos versiones descollande de dos clásicos del folclore, la "Tonada de una viejo amor" de Jaime Dávalos y Eduardo Falú, y El Mensú, de Ramón Ayala, en la que el propio intérprete descolló con el cajón peruano.

Durante una hora, que incluyeron bises como "Las cosas tienen movimiento" y "Tratando de crecer", pasaron canciones infalibles coreadas y aplaudidas por el público. "Eclipse de mar",  "Historia de Matecocido", "La vida es una moneda" o "El Tempano", fueron de las más celebradas y el artistas rosarino se llevó los aplausos más fuertes por su entrega sobre el escenario.