Tras la victoria electoral en la provincia de Buenos Aires, el jefe de Gabinete Carlos Bianco negó que el peronismo haya alcanzado su límite de votos y relativizó la posibilidad de una candidatura presidencial de Axel Kicillof. Además, lanzó duras críticas al estilo de gobierno de Javier Milei y anticipó que octubre será un nuevo test político.
En una entrevista radial con Ernesto Tenembaum, Bianco rechazó la interpretación de Javier Milei sobre los resultados legislativos en Buenos Aires. “Vale recordar que en su primera elección el gobernador sacó el 52%. O sea que no es su techo. Tiene otro techo”, afirmó el funcionario, en clara alusión al 47% obtenido por Fuerza Patria en los comicios recientes.
La lectura oficial apunta a que el peronismo aún tiene margen de crecimiento, especialmente en el interior bonaerense y entre sectores golpeados por la política económica nacional. “Muchos productores rurales se están fundiendo. Pero también se reconoce el esfuerzo del gobierno provincial con medidas históricas”, agregó Bianco.
Kicillof 2027: una idea que no despega (por ahora)
Consultado sobre una eventual candidatura presidencial de Axel Kicillof, Bianco fue categórico: “No, no creo. Hay que construir mucho políticamente todavía y el objetivo nunca fue establecer una candidatura presidencial”. La estrategia, según explicó, fue presionar al presidente Milei para que modifique el rumbo económico, no instalar figuras nacionales.
Este posicionamiento busca evitar una nacionalización prematura del liderazgo bonaerense, manteniendo el foco en la gestión territorial y en consolidar el poder en octubre.
Críticas a Milei: “Sin proyecto productivo, no hay futuro”
Bianco también apuntó contra el contenido y las formas del presidente Javier Milei. “Gobernar de esta forma, sin un proyecto productivo, sin generar empleo y con agresiones permanentes, me parece que es una forma que ha fracasado”.
En su análisis, el jefe de Gabinete bonaerense advirtió que si Milei no modifica el rumbo, “se va a pegar otro golpe en octubre”.
La frase “Nos vemos en octubre” se convirtió en el nuevo mantra del oficialismo provincial, que apuesta a ampliar su base electoral y consolidar su narrativa de gestión frente a la confrontación libertaria.