La ciudad de La Plata se prepara para una jornada de alta tensión futbolística: este domingo 13 de abril, desde las 15:30, Gimnasia y Estudiantes volverán a verse las caras en una nueva edición del clásico platense. El duelo se jugará en el estadio Juan Carmelo Zerillo y, como es habitual en estos eventos de gran convocatoria, el operativo de seguridad será amplio, estricto y coordinado por múltiples fuerzas.
La Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide) confirmó que se desplegarán más de 730 personas abocadas al control del evento. El operativo incluye 630 efectivos de la Policía Bonaerense, 100 agentes de seguridad privada, cuatro ambulancias de alta complejidad, personal de la Cruz Roja, bomberos y equipos médicos de emergencia. El objetivo es garantizar la seguridad dentro y fuera del estadio, pero también en distintos puntos sensibles de la ciudad.
Un operativo que empieza mucho antes del pitazo inicial
Las puertas del estadio del Bosque se abrirán a las 12:30, tres horas antes del inicio del partido, y el ingreso estará habilitado únicamente para socios del club local con canje previo realizado. No se venderán entradas generales, por lo que quienes no hayan asegurado su lugar con antelación no podrán ingresar. Una vez colmada la capacidad del estadio, se cerrarán los accesos para evitar sobrepasar el aforo habilitado.
El control será exhaustivo: se exigirá entrada, carnet de socio y DNI, y se aplicará el derecho de admisión mediante dispositivos móviles. Aprevide ya realizó una inspección en el estadio esta semana para afinar detalles del operativo.
Accesos, controles y cortes en la ciudad
Los accesos habilitados para el público serán las puertas 5, 14, 21, 22 y 23. La prensa acreditada podrá ingresar por la 23 bis, mientras que las puertas 38 y 39 quedarán reservadas para situaciones de emergencia. Desde las primeras horas del domingo se implementarán cortes de tránsito en las inmediaciones del estadio, con apoyo de la Secretaría de Seguridad de La Plata, el área de Control Urbano y el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM).
Además, se activarán operativos en puntos clave como las sedes sociales de ambos clubes, zonas de alta circulación como el centro platense y accesos a la ciudad. También se custodiará el traslado de los planteles, con especial atención al micro visitante, que partirá desde el Country Club de City Bell con vigilancia permanente.
Un recibimiento especial para el Lobo
Por disposición de Aprevide, se permitirá el ingreso de banderas cortas y largas, así como instrumentos de viento, lo que anticipa un recibimiento imponente por parte de la hinchada tripera. La medida busca garantizar un marco festivo y, al mismo tiempo, evitar tensiones innecesarias entre el público y las autoridades.
El operativo de vigilancia comenzará desde la noche del sábado, con monitoreo en tiempo real a través de las cámaras ubicadas dentro y fuera del estadio. El desafío no es menor: se trata de uno de los partidos más intensos del fútbol argentino, en una ciudad que vive cada clásico como un hecho social que desborda lo estrictamente deportivo.