Más de 2.200 instituciones deberán reinscribirse en el régimen de tarifa diferencial energética. El Ejecutivo busca “focalizar la ayuda” y eliminar privilegios indebidos. El trámite se realiza vía TAD y hay 90 días para completarlo.
El Gobierno nacional oficializó un nuevo procedimiento para que los clubes de barrio y de pueblo mantengan el beneficio de la tarifa subsidiada en los servicios de luz y gas por redes. La medida, publicada en el Boletín Oficial mediante la Disposición 4/2025 de la Subsecretaría de Planeamiento Energético, establece un plazo de 90 días para revalidar la inscripción a través de la plataforma Trámites a Distancia (TAD).
Durante ese período, los subsidios se mantendrán vigentes hasta que cada caso sea evaluado y resuelto por la autoridad competente.
Focalización y transparencia: el nuevo eje del esquema energético
Según el Ejecutivo, la reestructuración busca “sanear el esquema tarifario” y garantizar que la ayuda estatal llegue a quienes realmente la necesitan. El vocero presidencial, Manuel Adorni, denunció que durante años se otorgaron subsidios millonarios a clubes de élite, profesionales o con fines comerciales, distorsionando el espíritu del beneficio.
“El Estado no puede seguir financiando consumos energéticos de entidades que tienen capacidad contributiva”, afirmó Adorni.
Requisitos y documentación: quiénes pueden acceder
Para conservar el beneficio, los clubes deberán acreditar:
- Personería jurídica vigente en Argentina
- Domicilio legal en el país
- Al menos tres años de antigüedad formal
- Entre 50 y 2.000 socios al momento de la inscripción
Además, deberán presentar documentación que respalde su carácter social y comunitario, el tipo de actividades que desarrollan y el universo de beneficiarios.
Crisis energética y alerta en los clubes
La medida llega en un contexto crítico: el 40% de los clubes de barrio asegura estar en peor situación económica que en 2023, según la Encuesta Nacional de Clubes realizada por Táctica. El 95% de las entidades registró aumentos en los costos de servicios, mientras que el 75% ajustó la cuota social por debajo de la inflación.
La revalidación se convierte en una carrera contra el tiempo para evitar perder el beneficio y enfrentar tarifas plenas.