La bancada amarilla atraviesa tensiones internas mientras La Libertad Avanza suma diputados y reordena el tablero parlamentario. La salida de Gustavo Coria y el ingreso de Fernanda Coitinho profundizan la crisis en el partido fundado por Mauricio Macri.
La preocupación en el PRO se intensificó tras la decisión de Gustavo Coria de asumir como ministro del Interior y pedir licencia en su banca de diputado. Su lugar será ocupado por Fernanda Coitinho, dirigente referenciada en Sebastián Pareja, lo que implica un nuevo refuerzo para La Libertad Avanza.
La movida reduce la representación del PRO en la Cámara baja y amplía la del oficialismo libertario, que desde septiembre viene capitalizando fugas de legisladores opositores.
Internas y estrategia parlamentaria
En paralelo, el PRO intenta contener las tensiones internas mientras define su esquema parlamentario. El propio Mauricio Macri encabezó una reunión del Consejo Nacional del partido, donde se resolvió no conformar un interbloque con los libertarios para preservar la independencia política del espacio.
La discusión incluyó también el reemplazo de Silvana Giudici, quien dejó su banca para desempeñarse como secretaria parlamentaria del bloque oficialista, generando otro vacío en la bancada amarilla.
Un bloque en redefinición
La fuga de legisladores y la presión de La Libertad Avanza obligan al PRO a replantear su rol en el Congreso. Analistas advierten que la pérdida de volumen parlamentario debilita su capacidad de negociación y lo obliga a redefinir su identidad política en un escenario donde los libertarios ganan terreno.


