En un intento por reordenar el mapa político del peronismo bonaerense, Cristina Fernández de Kirchner confirmó que competirá como candidata a diputada provincial por la Tercera Sección Electoral en las elecciones del próximo 7 de septiembre. La decisión, que apunta a reforzar la base electoral del PJ en uno de sus bastiones históricos, también representa un fuerte mensaje interno a quienes promueven estrategias por fuera de la unidad.
“¿Alguien cree que si al peronismo no le va bien en septiembre, nos puede ir bien en octubre?”, lanzó la expresidenta durante una exposición en la que además dejó en claro que su participación busca evitar una derrota doble: en la legislatura y en la provincia.
La postulación de Cristina no solo sacude al peronismo tradicional, sino que también deja expuestos a varios intendentes de peso que hasta ahora habían alineado su estrategia con Axel Kicillof. El mensaje parece ir directo a nombres como Fernando Espinoza (La Matanza), Jorge Ferraresi (Avellaneda), Mario Secco (Ensenada), Mariano Cascallares (Almirante Brown) y Fabián Cagliardi (Berisso), que podrían ver condicionado su armado territorial y la confección de listas ante el ingreso de la figura de mayor peso del kirchnerismo.
¿Por qué la Tercera Sección?
La Tercera Sección Electoral es el núcleo más populoso del Conurbano bonaerense, con 19 municipios que concentran el voto peronista más duro, entre ellos La Matanza, Lomas de Zamora, Quilmes, Avellaneda, Florencio Varela y Berazategui. El distrito representa un universo de cinco millones de votantes y elige 18 diputados y 9 senadores provinciales. Si bien Cristina vive en la Ciudad de Buenos Aires y tiene domicilio en Santa Cruz, ni la Constitución ni la legislación provincial impiden que se postule por otra sección.
El movimiento sorprende a quienes no conocen en profundidad el sistema electoral bonaerense, pero se ajusta perfectamente a los márgenes legales y, sobre todo, busca capitalizar la fuerza simbólica del Conurbano Sur como bastión kirchnerista.
Un mensaje para adentro y para Kicillof
Cristina también aprovechó para enviar un tiro por elevación a la decisión de desdoblar las elecciones en la provincia, una estrategia impulsada por el gobernador Axel Kicillof. Aunque no lo nombró directamente, cuestionó con dureza la conveniencia de separar la elección provincial de la nacional: “Si alguien tomó la idea de desdoblar porque pensaba que la oposición iba a ir dividida, bueno…”.
Más allá de las diferencias, la exmandataria reiteró la necesidad de avanzar en un armado de unidad. “En 2019 convoqué a los que me habían puteado durante mucho tiempo y construimos una lista única que nos permitió ganar en primera vuelta”, recordó, reivindicando la fórmula que llevó a Kicillof a la gobernación y a Alberto Fernández a la presidencia.
Cristina también rememoró cómo, en 2023, promovió una interna en el Frente de Todos cuando Alberto Fernández impulsaba a Scioli y ella prefería a Wado de Pedro. La definición final, con Sergio Massa como candidato presidencial, fue resultado —según sus palabras— de una reunión en su despacho con Máximo Kirchner, Axel Kicillof, Wado y Massa. “Si alguno de ellos quiere desmentirme, que lo haga”, desafió mirando a cámara.
Críticas al modelo Milei y advertencias económicas
La líder del PJ también dedicó un tramo de su exposición al gobierno nacional. Definió al presidente Javier Milei como “un marginal que se ocupa de los ricos” y aseguró que su modelo económico es insostenible. “Ya vivimos esto en la dictadura, con el menemismo y con la Alianza. Es un modelo de dólar barato, cepo al salario y ajuste brutal”, expresó.
Criticó la reducción del Estado, la situación social emergente y comparó el actual esquema con la llamada “tablita” de Martínez de Hoz, advirtiendo que se trata de una receta ya aplicada en el pasado, con resultados trágicos. “Este gobierno copia a los economistas de la dictadura, sin plan y sin estructura política”, alertó.
También sostuvo que algunas áreas estratégicas, como el Hospital Garrahan, están siendo víctimas del ajuste pese a haber mostrado una gestión ejemplar. “Esta derecha antiestado, cruel y un tanto esotérica, está destruyendo estructuras que han dado resultados”, insistió.
Implicancias para la región capital
La candidatura de Cristina desde la Tercera Sección también impacta en el escenario político de la región capital. Aunque la ciudad de La Plata pertenece a la Octava Sección Electoral, forma parte de un entorno político y geográfico en el que los movimientos del kirchnerismo tienen repercusión directa. Municipios vecinos como Ensenada y Berisso —históricamente alineados al kirchnerismo— podrían ver modificadas sus estrategias locales, especialmente si la postulación de CFK acelera tensiones internas o condiciona listas legislativas y de concejales.
En este nuevo tablero, los armados municipales deberán reacomodarse a un escenario donde la expresidenta vuelve a la boleta y marca el ritmo político de cara a septiembre y octubre. En términos electorales, su figura sigue siendo el faro para una base que, aunque golpeada, aún conserva peso territorial.
