Miércoles 24 de diciembre de 2025
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Cristina Kirchner pasará la Navidad internada: su recuperación se extiende más de lo previsto

Cristina Fernández de Kirchner permanecerá internada en el Sanatorio Otamendi durante la Nochebuena y la Navidad. Aunque su evolución es favorable y se encuentra sin fiebre, el último parte médico confirmó que el tratamiento por la peritonitis localizada exige un protocolo estricto con antibióticos y controles que extenderán la internación entre 5 y 7 días

La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner fue sometida el pasado sábado a una cirugía de urgencia en el Sanatorio Otamendi por un cuadro de apendicitis aguda con peritonitis localizada. El procedimiento se realizó sin complicaciones, pero el equipo médico decidió aplicar un protocolo estricto para garantizar una recuperación completa.

El último parte oficial difundido por la institución señala que la paciente “continúa con evolución favorable, sin fiebre, bajo tratamiento antibiótico endovenoso y con drenaje peritoneal”.

Nochebuena y Navidad en el Otamendi

La decisión médica implica que Cristina pasará Nochebuena y Navidad internada en el centro de salud porteño, acompañada por su círculo íntimo. Los especialistas estiman que la internación total demandará entre 5 y 7 días, lo que pospone cualquier posibilidad de alta inmediata.

Fuentes cercanas al equipo médico remarcan que la evolución se encuentra “dentro de los parámetros esperables” y que la prioridad es evitar riesgos de complicaciones posteriores.

Un cuadro que exige controles permanentes

El tratamiento incluye:

  • Antibióticos endovenosos para controlar la infección.
  • Drenaje peritoneal colocado durante la cirugía, que se mantiene activo.
  • Controles clínicos permanentes para monitorear la evolución.
    Aunque la recuperación es positiva, los médicos insisten en que la paciente debe permanecer bajo observación estricta hasta completar el esquema terapéutico.

Impacto político y mediático

La internación prolongada de Cristina Kirchner ocurre en un contexto de alta tensión política dentro del peronismo. Su ausencia de la escena pública durante las fiestas refuerza la incertidumbre sobre su rol en la estrategia electoral de cara a 2027.

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