En un golpe de efecto, la expresidenta llamó a un grupo de intendentes a cerrar filas contra Milei y confirmó que irá por una banca bonaerense en 2025, desafiando a Kicillof y a la oposición. Fuentes cercanas a Milei sugieren que el retorno de Cristina podría polarizar aún más la elección, beneficiando al discurso anti-kirchnerista que catapultó al Presidente al poder.
Cristina Fernández de Kirchner reapareció este miércoles con un mensaje claro: unidad a toda costa. Durante una reunión clave con intendentes afines en la sede del Sindicato de los Trabajadores y Trabajadoras de la Administración Nacional de la Seguridad Social (SECASFPI), la expresidenta no solo marcó la cancha frente a las tensiones con el gobernador Axel Kicillof, sino que también confirmó su decisión de candidatearse como diputada provincial por la Tercera Sección Electoral en las elecciones de 2025.
El anuncio, que rápidamente se viralizó en redes sociales y portales de noticias, llega en un momento de alta sensibilidad política en la provincia de Buenos Aires, donde el desdoblamiento electoral impulsado por Kicillof amenaza con fragmentar al Partido Justicialista (PJ). Cristina, en su rol de presidenta del PJ nacional, dejó en claro que no está dispuesta a ceder terreno y que su jugada busca consolidar al peronismo frente al avance de Javier Milei y La Libertad Avanza.
Una reunión con mensaje directo
El encuentro, que tuvo lugar el 9 de abril, reunió a figuras clave del kirchnerismo como Mayra Mendoza (Quilmes), Juan Ustarroz (Mercedes), Julián Álvarez (Lanús), Federico Otermín (Lomas de Zamora), Gustavo Menéndez (Merlo) y Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas). Según fuentes presentes, Cristina no solo llamó a “preservar la unidad” del espacio, sino que identificó a Milei como el “principal enemigo” a derrotar, dejando en segundo plano las disputas internas con el gobernador bonaerense.
“Si desdoblan, voy como candidata a diputada provincial”, habría afirmado la expresidenta, según trascendidos que circularon en los medios. La Tercera Sección Electoral, un bastión histórico del peronismo que abarca distritos populosos del conurbano como La Matanza y Lomas de Zamora, será el terreno donde Cristina planea plantar bandera. Aunque no se ofrecieron detalles sobre el armado final de las listas, su decisión parece ser una respuesta directa al desafío de Kicillof, quien insiste en separar los comicios provinciales de los nacionales.
¿Unidad o pulseada interna?
El anuncio de Cristina Kirchner no puede leerse sin el telón de fondo de la creciente fractura dentro del PJ bonaerense. Axel Kicillof, que en los últimos meses ha buscado perfilarse como un líder autónomo del peronismo, apuesta por el desdoblamiento electoral para plebiscitar su gestión y evitar que la elección provincial quede opacada por la dinámica nacional. Sin embargo, esta estrategia chocó con la visión del kirchnerismo duro, que ve en la concurrencia de los comicios una oportunidad para alinear fuerzas contra el oficialismo libertario.
“Cristina bajó la línea de que la unidad es innegociable. No quiere que el PJ se balcanice”, comentó un intendente presente en la reunión bajo condición de anonimato. Sin embargo, la confirmación de su candidatura también podría interpretarse como un ultimátum: o el gobernador retrocede en su plan, o ella competirá en un terreno que podría poner en jaque el liderazgo de Kicillof en la provincia.
El contexto judicial y la oposición al acecho
El regreso de Cristina al centro de la escena política no está exento de polémica. Su candidatura llega en medio de un escenario judicial complejo, con condenas por corrupción que aún no están firmes y la reciente sanción de Estados Unidos, que le prohíbe ingresar a ese país junto a su familia. Este contexto ha reavivado el debate sobre la ley de “Ficha Limpia”, un proyecto impulsado por la Coalición Cívica en la Legislatura bonaerense que busca impedir que personas con condenas penales se postulen a cargos públicos, incluso si las sentencias no son definitivas.
“Es un movimiento estratégico. Si logra los fueros, blindaría su situación judicial”, analizó un operador político opositor. La iniciativa de “Ficha Limpia”, que ya cuenta con media sanción en la Cámara de Diputados nacional, podría convertirse en un obstáculo para los planes de Cristina si avanza en el Senado o se replica en la provincia.
Reacciones y repercusiones inmediatas
El anuncio generó un torbellino de reacciones. En X, usuarios kirchneristas celebraron la vuelta de “la jefa” al ruedo electoral, mientras que sectores opositores lamentaron la falta de avances en “Ficha Limpia” y cuestionaron la jugada como un intento de perpetuarse en el poder.
Por su parte, el oficialismo de La Libertad Avanza aún no emitió una postura oficial, aunque fuentes cercanas a Milei sugieren que el retorno de Cristina podría polarizar aún más la elección, beneficiando al discurso anti-kirchnerista que catapultó al presidente al poder.
¿Qué sigue para el PJ y Cristina?
Con esta jugada, Cristina Kirchner no solo reafirma su peso dentro del peronismo, sino que también lanza un mensaje al resto de los actores políticos: sigue siendo una fuerza gravitacional imposible de ignorar. Sin embargo, el camino hacia 2025 está plagado de incógnitas. ¿Logrará imponer la unidad que reclama o terminará enfrentándose a Kicillof en una interna feroz? ¿Avanzará la oposición con “Ficha Limpia” para bloquear su candidatura?
Por ahora, el tablero político bonaerense se recalienta, y la expresidenta vuelve a ser el eje de todas las miradas. Como siempre, su próximo movimiento será clave para definir el rumbo del PJ y el destino electoral de la provincia más importante del país.