En un tono combativo, la exmandataria calificó a los jueces del máximo tribunal como un “triunvirato de impresentables” y sugirió que la sentencia responde a intereses del “poder económico concentrado” y está sincronizada con el calendario electoral.
En un encendido discurso frente a la militancia reunida en la puerta de la sede del Partido Justicialista (PJ) en Buenos Aires, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner arremetió contra la Corte Suprema de Justicia, a la que acusó de imponer un “cepo al voto popular” tras el fallo que ratificó su condena a seis años de prisión por la causa Vialidad. En un tono combativo, la exmandataria calificó a los jueces del máximo tribunal como un “triunvirato de impresentables” y sugirió que la sentencia responde a intereses del “poder económico concentrado” y está sincronizada con el calendario electoral.
El fallo de la Corte, emitido hace una hora, rechazó por unanimidad los recursos de queja presentados por la defensa de Kirchner, dejando firme la condena por irregularidades en la adjudicación de 51 obras públicas viales en Santa Cruz durante su gestión. La decisión judicial no solo reavivó el debate político en Argentina, sino que también desató una ola de reacciones, desde el apoyo de la militancia kirchnerista hasta las celebraciones de sectores opositores, como el presidente Javier Milei, quien expresó en redes sociales: “Justicia, fin”.
Un discurso cargado de críticas
Desde la emblemática sede del PJ en la calle Matheu, Cristina Kirchner se dirigió a una multitud que, bajo la lluvia, coreaba su nombre. “Esta Argentina que estamos viviendo no deja de sorprendernos. Al cepo del salario que ha puesto el gobierno de Milei, ahora el Partido Judicial le agrega el cepo al voto popular”, afirmó, vinculando la sentencia con una supuesta maniobra para limitar la voluntad popular. La expresidenta fue más allá al describir a los magistrados de la Corte como “monigotes que responden a mandos naturales muy por arriba de ellos”, en referencia al “poder económico concentrado de la República Argentina”.
En su alocución, Kirchner también aludió al intento de magnicidio en su contra el 1 de septiembre de 2022, recordando titulares de prensa que, según ella, anticipaban el fallo judicial. “¿Saben por qué este cepo? Porque es el poder económico concentrado, compañeros y compañeras. Ese que tituló ‘La bala que no salió, pero el fallo que sí saldrá’”, sentenció, en una clara alusión a sectores mediáticos y económicos que, a su juicio, orquestan su persecución judicial.
Reacciones y contexto político
fallo de la Corte Suprema desató un vendaval de reacciones en el espectro político argentino. Mientras la militancia kirchnerista se movilizó en apoyo a la expresidenta, con cortes en la Autopista La Plata-Buenos Aires, el oficialismo celebró la decisión como un avance en la lucha contra la corrupción. El presidente Milei, conocido por su postura crítica hacia el kirchnerismo, no dudó en expresar su satisfacción en redes sociales, consolidando la polarización que atraviesa al país.
En el entorno político, las palabras de Kirchner resonaron como una advertencia sobre el impacto de la sentencia en el escenario electoral. La expresidenta sugirió que el fallo busca condicionar el voto popular de cara a futuros comicios, una narrativa que refuerza su rol como figura central del peronismo y víctima de lo que denomina “lawfare”. “No se confundan, no es la oposición, es el poder económico”, insistió, buscando desmarcar la decisión judicial de un enfrentamiento político tradicional.
Un fallo con implicancias
La condena ratificada por la Corte Suprema no implica la prisión inmediata de Cristina Kirchner, ya que aún restan instancias procesales, como la revisión de la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Sin embargo, el impacto político es innegable. La sentencia refuerza la percepción de una justicia politizada, tanto para los detractores como para los defensores de la expresidenta, en un contexto de alta tensión social y económica en Argentina.
El término “cepo al voto popular” utilizado por Kirchner, además de ser una frase de alto impacto mediático, busca instalar la idea de que la justicia está interfiriendo en la soberanía popular, un mensaje que resuena con fuerza entre sus seguidores. La referencia al “triunvirato de impresentables” no solo apunta a deslegitimar a los jueces, sino que también refuerza la narrativa de un Poder Judicial cooptado por intereses externos.
El escenario que viene
La reacción de Cristina Kirchner no solo refleja su estrategia de confrontación con el Poder Judicial, sino que también marca la pauta para el futuro del peronismo en un año electoral clave. Su capacidad para movilizar a la militancia y mantener el liderazgo dentro del PJ sigue intacta, a pesar de los reveses judiciales. Sin embargo, el fallo de la Corte Suprema plantea interrogantes sobre su rol político a largo plazo y el impacto en la unidad del peronismo frente a un gobierno libertario que no cede terreno.
En las redes sociales, el hashtag #CepoAlVotoPopular se convirtió en tendencia, con miles de usuarios kirchneristas replicando las palabras de la expresidenta, mientras que otros sectores celebraron el fallo como un paso hacia la rendición de cuentas. La polarización, una vez más, se hace evidente en el debate público.
Mientras Argentina enfrenta una crisis económica y social, el fallo de la Corte Suprema y las palabras de Cristina Kirchner añaden un nuevo capítulo a una saga política que parece lejos de terminar. La expresidenta, fiel a su estilo, no da tregua y promete seguir dando batalla, tanto en la calle como en el escenario político.
