El abogado de Cristina Fernández de Kirchner, Gregorio Dalbón, presentó una denuncia penal contra el presidente Javier Milei, luego de que el mandatario asegurara en televisión que él mismo “decidió que la ex presidenta vaya presa”.
Dalbón consideró que esa frase constituye un “abuso de autoridad” y una admisión de persecución política. Según explicó, las declaraciones de Milei violan la independencia del Poder Judicial y el artículo 109 de la Constitución Nacional, que prohíbe al Poder Ejecutivo ejercer funciones judiciales.
“Al atribuirse la facultad de decidir quién va preso, el Presidente se coloca por encima de los jueces”, sostuvo el letrado.
Los argumentos de la denuncia
En la presentación, Dalbón acusó a Milei de cometer el delito de abuso de autoridad, contemplado en el artículo 248 del Código Penal, que castiga con prisión e inhabilitación a los funcionarios que dicten resoluciones contrarias a la Constitución o las leyes.
Para el abogado, la frase del presidente no fue una opinión política, sino una admisión de poder ilegal. “Si un presidente reconoce haber influido en un proceso judicial, eso invalida la legitimidad de las pruebas y de la sentencia”, afirmó.
“Confesó el lawfare”
Dalbón sostuvo que la denuncia no solo busca una sanción penal, sino defender el Estado de Derecho y la división de poderes. En ese sentido, afirmó que Milei “confesó la existencia del lawfare”, es decir, el uso del sistema judicial con fines de persecución política.
“Cuando Milei dice que él metió presa a Cristina, confiesa algo gravísimo: que la persecución fue política y que la Justicia no fue independiente”, expresó.
“En cualquier país serio, eso bastaría para abrirle un juicio político al Presidente”, agregó.
Contexto y antecedentes
El abogado recordó que la condena contra la actual titular del Partido Justicialista (PJ) estuvo precedida por vínculos entre jueces, fiscales y el expresidente Mauricio Macri, además de una campaña mediática que anticipaba el fallo.
“Son argumentos sobrados para pedir la anulación definitiva de la sentencia. El lawfare fue confesado: Cristina es una presa política”, concluyó Dalbón.
