El dólar oficial podría cerrar el 2025 por encima de los $1.400, según el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) publicado por el Banco Central (BCRA). El informe, elaborado con proyecciones de consultoras privadas y bancos, señala además que la inflación mensual se mantendría por debajo del 2%, a pesar de la reciente suba del tipo de cambio financiero.
Las proyecciones actualizadas, recogidas entre el 29 y el 31 de julio, fueron realizadas por 41 participantes, entre los cuales se cuentan 31 consultoras y centros de investigación —tanto locales como internacionales— y 10 entidades financieras que operan en el país. Esta fue la séptima edición del REM en lo que va del año y se centró en variables claves como dólar, inflación, actividad económica, tasas de interés, comercio exterior y empleo.
El dólar en el radar: proyecciones y contexto
El consenso general prevé que el tipo de cambio nominal promedio para diciembre de 2025 se ubique en $1.405 por dólar, lo que representa una suba de $100 respecto al informe anterior, cuando se esperaba un cierre de $1.305. Esa estimación implica una variación interanual del 37,6%.
En lo inmediato, el promedio proyectado para agosto es de $1.315, aunque los diez pronosticadores más certeros del panel —el denominado Top 10 del REM— estiman un valor algo menor: $1.304. Para fin de año, este mismo grupo ajusta su previsión a $1.409, un número que refleja la volatilidad que atraviesa el mercado cambiario.
De hecho, en el último mes el contado con liquidación (CCL) —dólar financiero que se utiliza para fugar divisas— saltó de $1.203 a más de $1.350, lo que encendió señales de alarma sobre su posible impacto en los precios. Sin embargo, la mayoría de los analistas coincide en que ese traslado será limitado en los próximos meses, en parte por el control sobre el dólar oficial y la caída del consumo interno.
Inflación: debajo del 2% y en baja
Pese al movimiento cambiario, los pronósticos siguen señalando una inflación contenida. Para julio, se espera un índice del 1,8%, apenas una décima por encima del relevamiento anterior. En agosto, la proyección se mantiene en el mismo nivel. En cuanto a la inflación núcleo, el Top 10 anticipa 1,9% para julio y 1,8% para agosto, con una tendencia a la baja en el segundo semestre.
Detrás de esa moderación inflacionaria hay factores que no deben pasarse por alto: una fuerte contracción del consumo, ralentización de la circulación del dinero y congelamiento parcial de precios regulados, todos elementos que ayudan a contener subas incluso cuando el tipo de cambio financiero se mueve con fuerza.
El REM prevé que la inflación mensual seguirá por debajo del 2% al menos hasta enero de 2026, lo que sería un dato relevante si se confirma en un contexto económico aún incierto, con eventuales ajustes de precios o tarifas en el horizonte.
Actividad, tasas y comercio exterior
La actividad económica muestra señales de recuperación leve. Se proyecta un crecimiento trimestral del 0,8% para el segundo trimestre del año, una desaceleración a 0,5% en el tercero, y una mejora a 0,6% en el último tramo del año. A nivel anual, el PBI crecería 5% en 2025, tanto en la mediana como entre los mejores pronosticadores.
En cuanto a las tasas de interés, la TAMAR —referencia para depósitos a plazo fijo de más de $1.000 millones en bancos privados— rondaría el 34,85% nominal anual en agosto, lo que implica una tasa efectiva mensual del 2,9%. Para diciembre, caería a 29,5% nominal, con una tasa efectiva mensual del 2,5%.
Respecto al comercio exterior, las proyecciones se mantuvieron estables. Las exportaciones FOB alcanzarían u$s81.662 millones, mientras que las importaciones CIF totalizarían u$s75.115 millones, con lo cual se espera un superávit comercial de u$s6.507 millones, levemente superior al estimado en el informe anterior.
Empleo y resultado fiscal
El panorama fiscal también trae proyecciones optimistas. Para 2025, se espera un superávit primario del Sector Público Nacional no Financiero de $13,6 billones, mientras que el Top 10 eleva ese número a $14,3 billones. Ninguno de los consultados pronosticó un resultado menor a los $9,5 billones.
En materia de empleo, se estima que la tasa de desocupación baje del 7,6% en el segundo trimestre a 7,0% hacia fin de año, con el Top 10 ajustando aún más esa cifra a 6,9%. Esta expectativa está directamente vinculada a una mejora moderada en la actividad económica y, eventualmente, a un repunte del mercado laboral.
Una hoja de ruta sujeta a la política y al mercado
En conjunto, los datos del REM trazan un escenario de relativa estabilidad macroeconómica para los próximos meses: dólar oficial en torno a los $1.400, inflación en descenso y un crecimiento moderado de la economía. Pero esa fotografía podría cambiar según cómo evolucione la política económica tras las elecciones, y el grado de tensión que mantenga el mercado financiero.
En la ciudad de La Plata, donde muchos pequeños ahorristas siguen de cerca el dólar y la inflación como termómetros de la economía cotidiana, estas proyecciones ayudan a anticipar tendencias que impactarán en decisiones de consumo, ahorro y financiamiento hacia fin de año.