El gobierno de Kicillof denunció al grupo libertario que opera en un Falcon verde. Funcionarios del ministerio de Justicia consideran que se trata de un hecho de gravedad institucional y le pidieron al juez Alejo Ramos Padilla que abra una investigación.
El gobierno de la provincia de Buenos Aires, encabezado por Axel Kicillof, presentó una denuncia ante la justicia federal para que se investigue a un grupo de militantes libertarios que operan en San Isidro utilizando un Ford Falcon verde. Este vehículo, tristemente célebre por su asociación con la última dictadura cívico-militar argentina, fue utilizado por el grupo para borrar pintadas relativas a los Derechos Humanos, según fuentes oficiales.
La denuncia fue radicada en el juzgado federal 1 de La Plata, a cargo de Alejo Ramos Padilla, y lleva la firma del subsecretario de Derechos Humanos, Matías Moreno, y Lisandro Pelegrini, subsecretario de Política Criminal del ministerio de Justicia bonaerense. Los funcionarios solicitan que se investigue si los miembros de La Libertad Avanza (LLA) San Isidro violaron la legislación electoral al reivindicar símbolos de la dictadura.
Según el texto de la denuncia, el accionar del grupo libertario constituye un «hecho de extrema gravedad institucional». Se argumenta que los militantes de LLA reivindican símbolos de la dictadura y el terrorismo de Estado al utilizar un vehículo como el Ford Falcon verde.
En un video que circuló en redes sociales, se puede ver a los militantes bajando de un Falcon verde para tapar las pinturas de las Abuelas de Plaza de Mayo en los paredones del Jockey Club de San Isidro. En el video, los militantes se muestran como un «grupo de tareas», coordinados y repartiendo latas de pintura blanca y rodillos nuevos. «Estamos tapando las mentiras que se dijeron durante años», dice uno de los integrantes del grupo.
La acción de los militantes libertarios generó un fuerte rechazo por parte de organizaciones de Derechos Humanos y sectores políticos. Se considera que la utilización de un símbolo de la dictadura como el Falcon verde es una provocación y una falta de respeto a la memoria de las víctimas del terrorismo de Estado.
Los funcionarios del gobierno bonaerense entienden que el accionar de los militantes reivindica la última dictadura cívico-militar, la interrupción del orden constitucional y la articulación del territorio de Estado con los crímenes de lesa humanidad. «El carácter metonímico que como tropo del discurso asume el automóvil Ford Falcon para referirse a la última dictadura cívico-militar y al terrorismo de Estado ha sido probado y constatado en las causas más relevantes por crímenes de lesa humanidad», dice el texto de la denuncia.
En la denuncia se cita legislación sobre la regulación de los partidos políticos, jurisprudencia sobre el alcance de los derechos políticos y la libertad de expresión reconocida a los partidos políticos como instituciones fundamentales del sistema democrático y los límites constitucionales y de los instrumentos internacionales de protección a los derechos humanos frente a las expresiones de odio, discursos negacionistas o con fuerte contenido discriminador.
El portal La Política Online informó que los dirigentes libertarios involucrados son Pipo Paolucci, Mateo Servan, Ian Molina y Agustín Castiglione, este último señalado como el propietario del Falcon verde.