Este acto, que promete ser una demostración de fuerza territorial, no solo busca consolidar el liderazgo de Kicillof en la provincia, sino también posicionarlo como una figura clave en la reconfiguración del peronismo de cara a las elecciones legislativas del 7 de septiembre y los comicios presidenciales de 2027.
En un contexto de creciente tensión interna dentro del peronismo bonaerense, el gobernador Axel Kicillof ultima los preparativos para el lanzamiento oficial del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), su propio espacio político, el próximo 24 de mayo en el camping de UPCN en La Plata.
Este acto, que promete ser una demostración de fuerza territorial, no solo busca consolidar el liderazgo de Kicillof en la provincia, sino también posicionarlo como una figura clave en la reconfiguración del peronismo de cara a las elecciones legislativas del 7 de septiembre y los comicios presidenciales de 2027. Sin embargo, la movida profundiza la fractura con el kirchnerismo liderado por Cristina Fernández de Kirchner y el Frente Renovador de Sergio Massa, ante la posibilidad de que no se alcance un acuerdo para un frente unificado.
Un acto con tinte electoral y mensaje político
El camping de UPCN, ubicado camino a Arana, será el escenario donde Kicillof, respaldado por 42 intendentes, sindicatos de peso como la CGT, las CTA y gremios como Camioneros, buscará mostrar músculo político. El evento, que se espera multitudinario, tendrá al gobernador como único orador, una señal clara de su intención de liderar el espacio sin intermediarios. Según fuentes cercanas, el MDF movilizará estructuras desde todas las secciones electorales de la provincia, con el objetivo de proyectar una imagen de cohesión y fortaleza.
El ministro de Gobierno, Carlos Bianco, subrayó que el MDF “no es contra nadie”, sino una herramienta para fortalecer las políticas públicas de la gestión provincial y proyectar una alternativa hacia 2027. Sin embargo, la elección del 24 de mayo como fecha y el lugar emblemático de La Plata no son casuales: el acto llega en un momento de definiciones electorales tras la suspensión de las PASO provinciales y el desdoblamiento de los comicios bonaerenses, decisiones que Kicillof impulsó y que generaron roces con el cristinismo.
La construcción de una estructura propia
El lanzamiento del MDF marca un punto de inflexión en la estrategia de Kicillof, quien acelera la construcción de una estructura política propia ante la incertidumbre sobre un acuerdo con Cristina Kirchner y Sergio Massa. Desde el entorno del gobernador aseguran que el movimiento ya cuenta con presencia en los 135 distritos bonaerenses, con mesas políticas activas y candidatos propios en gestación. Este armado territorial busca garantizar al “axelismo” un lugar preponderante en la negociación de listas seccionales, especialmente en el interior de la provincia, donde el MDF podría liderar las boletas si se logra una unidad parcial con el kirchnerismo y el massismo.
Entre los intendentes que respaldan el proyecto figuran nombres de peso como Fernando Espinoza (La Matanza), Jorge Ferraresi (Avellaneda), Mario Ishii (José C. Paz), Fernando Moreira (San Martín), Andrés Watson (Florencio Varela) y Lucas Ghi (Morón). Además, el MDF cuenta con el apoyo de legisladores provinciales y organizaciones sociales como La Patria es el Otro, Somos Barrios de Pie y la Corriente Nacional de la Militancia, lo que amplía su base de sustentación.
Tensiones con Cristina y Massa
La interna peronista atraviesa un momento crítico. El kirchnerismo, liderado por Cristina y su hijo Máximo Kirchner, ha intensificado su propia estrategia con la creación de mesas distritales en municipios clave como Avellaneda, Lanús, Quilmes y Morón, promoviendo la figura de la expresidenta con pintadas y pasacalles que rezan “Cristina 2025”. Por su parte, Sergio Massa, desde el Frente Renovador, mantiene un rol activo en las negociaciones, pero su influencia se concentra en el conurbano, donde podría reclamar los primeros lugares en las listas de la Primera y Tercera sección electoral.
El lanzamiento del MDF ha generado malestar en el Instituto Patria, donde consideran que la movida de Kicillof “divide” al peronismo en un momento inoportuno, especialmente tras el escándalo del “criptogate” que afecta al gobierno de Javier Milei. “Es un movimiento de escisión que debilita la fuerza que lo llevó a ser gobernador”, señalaron fuentes cercanas a Cristina, quienes critican el timing del anuncio.
En este escenario, Kicillof no descarta competir en una interna si no hay unidad. Desde el MDF deslizan nombres como el del ministro Gabriel Katopodis para encabezar la boleta en la Primera sección y el de Jorge Ferraresi, quien podría enfrentarse a Cristina en la Tercera, aunque reconocen que sería un desafío arriesgado.
El trasfondo: un peronismo en reconfiguración
El MDF nace con un discurso que busca renovar el peronismo, apelando a “actualizar ideas” y “recuperar la agenda de las mayorías” tras la derrota nacional de 2023. Su documento fundacional, presentado en febrero de 2025, critica el “experimento de ajuste y crueldad” del gobierno de Milei y reivindica la gestión de Kicillof como un “escudo” contra las políticas de desregulación. Sin embargo, la propuesta de “reinventar el proyecto histórico” ha sido interpretada por el kirchnerismo como un intento de diferenciarse del legado de Cristina.`
El acto del 24 de mayo no solo será una foto de poder, sino también una señal al interior del peronismo: Kicillof está dispuesto a jugar sus propias cartas. Mientras la provincia se prepara para un año electoral decisivo, el MDF emerge como un actor central en la pulseada por el liderazgo del peronismo, con la mira puesta en 2027. La pregunta que queda en el aire es si el peronismo logrará recomponerse como un frente unido o si la interna derivará en una fractura definitiva.
