La discusión por el endeudamiento que impulsa el gobernador Axel Kicillof entra en una etapa decisiva en la Legislatura bonaerense, con La Plata como escenario central de la pulseada política y sindical. Mientras el Ejecutivo mantiene negociaciones contrarreloj para alcanzar los votos necesarios, los gremios estatales sumaron una fuerte presión pública para exigir la aprobación del proyecto.
Las centrales CTA de los Trabajadores, CTA Autónoma y CGT Regional La Plata convocaron a una conferencia de prensa para este miércoles a las 10 de la mañana en las escalinatas del Palacio Legislativo. Participarán secretarios generales y autoridades de sindicatos estatales con el objetivo de respaldar el pedido del gobernador y reclamar a los bloques parlamentarios que habiliten el tratamiento del paquete económico enviado por el Ejecutivo a principios de noviembre.
Presión sindical y respaldo político
La movilización gremial se alinea con el mensaje que Kicillof lanzó el lunes desde la Casa de Gobierno. Rodeado de intendentes, legisladores y funcionarios, el mandatario volvió a advertir sobre la urgencia de aprobar la autorización para tomar deuda por 3.685 millones de dólares, necesaria —según planteó— para sostener la gestión provincial y reforzar el financiamiento de los municipios en un contexto económico adverso.
El diagnóstico oficial apunta al impacto que la caída de recursos nacionales está teniendo en las cuentas provinciales y municipales, una preocupación que los gremios suman como argumento central para exigir celeridad en la aprobación.
Negociaciones ajustadas en la Legislatura
Mientras la presión crece en la calle, puertas adentro de la Legislatura las negociaciones avanzan con números muy finos. Tras la sesión preparatoria que definió las nuevas autoridades de la Cámara de Diputados, el oficialismo destrabó parte de las tensiones internas y comenzó a ordenar acuerdos con sectores de la oposición.
Unión por la Patria renovó el pacto de conducción entre el kirchnerismo y el massismo, que llevó a Alejandro Dichiara a la presidencia de Diputados. Detrás de esa reorganización, el objetivo inmediato sigue siendo garantizar los dos tercios de los votos necesarios para aprobar el endeudamiento, que exige un nivel de consenso mayor al requerido para sancionar el Presupuesto y la Ley Fiscal 2026.
PRO y UCR, en el centro de la escena
Los bloques del PRO y la UCR concentran la atención del oficialismo. Ambos atraviesan debates internos que mantienen en suspenso el resultado final.
En el radicalismo conviven posiciones divergentes: un sector cercano al foro de intendentes se muestra predispuesto a acompañar, mientras otros legisladores evalúan votar en contra. Algo similar ocurre en el PRO, donde existen diferencias entre el espacio que responde a Diego Santilli y los sectores referenciados en Cristian Ritondo y Néstor Grindetti.
Desde el santillismo señalaron que podrían votar de manera limitada: aprobar el proyecto en general y el fondo para los municipios, pero sin acompañar una ampliación plena del monto de endeudamiento. La postura generó malestar en La Libertad Avanza, que cuestionó cualquier tipo de respaldo al proyecto oficial.
Las claves del acuerdo
La negociación gira alrededor de dos puntos centrales:
- Fondo municipal: creación de un fondo de 350 mil millones de pesos para los distritos, con una garantía inicial de 250 mil millones que se pagaría en cinco cuotas durante el primer semestre de 2026.
- Banco Provincia: ampliación del directorio del BAPRO con la incorporación de seis nuevos cargos sin voto, como parte del esquema de acuerdos políticos.
La cuenta de los votos
El oficialismo confía en sumar apoyos por fuera del PRO: sectores de la UCR, los diputados de la Coalición Cívica, los bloques de Nuevos Aires y los libertarios dialoguistas de Unión y Libertad. Con esa combinación, Kicillof aspiraría a reunir unos 64 votos, superando el piso de 62 requerido para sancionar la ley.
No obstante, en el entorno del gobernador admiten que el resultado sigue abierto. Si el número no alcanza, emerge un plan alternativo: lograr ausencias en la votación de sectores opositores. Como el reglamento exige dos tercios de los presentes, una reducción del quórum permitiría bajar el umbral de apoyo necesario sin forzar votos afirmativos de quienes prefieren no respaldar la iniciativa.
Un día clave para Kicillof en La Plata
Con la presión sindical en las calles y una Legislatura atravesada por negociaciones políticas, el oficialismo juega una partida decisiva para cerrar el año legislativo con el paquete económico completo aprobado.
En La Plata, donde se concentran tanto la administración provincial como la disputa gremial y parlamentaria, el resultado de la sesión marcará un punto de inflexión para el arranque de 2026, especialmente para el financiamiento municipal y la gobernabilidad de la Provincia.
