A horas de las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, el círculo de Axel Kicillof apuesta a la cohesión interna, la territorialidad y el descontento social como motores de una jornada clave. La boleta de Fuerza Patria se presenta como el principal instrumento para frenar el avance libertario y consolidar poder legislativo.
Axel Kicillof cerró la campaña con recorridas por Merlo, Lomas de Zamora y La Plata, distritos estratégicos del conurbano bonaerense. En cada parada, el gobernador reforzó su narrativa: el voto como herramienta de autodefensa frente al ajuste nacional.
La “mateada” con vecinos en la Plaza Islas Malvinas de La Plata fue el gesto final de una campaña que priorizó el contacto directo y la gestión visible. Obras públicas, clubes de barrio y presencia en ferias productivas fueron los escenarios elegidos para mostrar músculo territorial.
Unidad sin fisuras (o casi): el peronismo se alinea en La Plata
Este domingo, los principales referentes de Fuerza Patria se reunirán en el hotel Grand Brizo de La Plata para esperar los resultados. La foto de unidad incluirá a Kicillof, Sergio Massa, Juan Grabois y dirigentes de La Cámpora, aunque Máximo Kirchner seguirá el escrutinio desde el domicilio de Cristina Fernández.
Pese a algunos roces internos —como el reclamo de inversión en Quilmes— el cierre mostró cohesión. La estrategia fue evitar actos masivos y apostar por recorridas focalizadas, con presencia de candidatos en cada sección electoral.
Expectativas: ¿voto castigo o respaldo territorial?
En el entorno de Kicillof hay moderado optimismo. La difusión del escándalo en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) golpeó al oficialismo nacional y podría beneficiar a Fuerza Patria en el voto legislativo.
La boleta peronista busca capitalizar el rechazo a las políticas de Javier Milei, especialmente en salud, educación y discapacidad. “La única boleta que le duele a Milei es la nuestra”, repitió el gobernador en Tigre, junto a Massa y candidatos de la Primera Sección.
El voto como límite: el mensaje final de Kicillof
“La boleta es la herramienta más efectiva; lo que más le va a doler. No es por las redes, es en las urnas”, dijo Kicillof en su último acto. El gobernador pidió que el enojo se transforme en sufragio, y que el resultado funcione como un freno institucional al avance libertario.
Con la mira puesta en 2027, el mandatario bonaerense se juega capital político en esta elección. Más bancas significan más margen para sostener su proyecto y posicionarse como alternativa nacional.