Después de más de 24 horas de intensas conversaciones, cruces entre sectores y maniobras de último minuto, Fuerza Patria logró sellar un acuerdo en la ciudad de La Plata y presentar una lista de diputados provinciales de consenso, evitando así una fractura que amenazaba con escalar.
La nómina definitiva estará encabezada por el actual legislador Ariel Archanco, presidente del PJ platense y dirigente de La Cámpora; lo sigue Lucía Iañez, funcionaria cercana al intendente Julio Alak y al gobernador Axel Kicillof; y el tercer lugar será ocupado por Juan Malpelli, del Frente Renovador, espacio alineado con Sergio Massa. La fórmula repite el esquema utilizado en las elecciones legislativas de 2021, consolidando un delicado equilibrio entre los tres principales sectores del peronismo local: camporismo, kicillofismo y massismo.
El acuerdo se firmó cerca de las 4 de la madrugada del domingo 20 de julio, al filo del vencimiento del plazo oficial para presentar las candidaturas. A esa hora también se terminó de definir el resto de las listas para las distintas secciones electorales de la provincia de Buenos Aires. En su mayoría, las boletas estarán dominadas por dirigentes de La Cámpora, en línea con el acuerdo sellado a nivel provincial entre Máximo Kirchner y Sergio Massa, con la participación activa de Kicillof.
Un cierre con tensión, amenazas de ruptura y maniobras de último momento
La negociación en la capital bonaerense fue especialmente compleja. Desde el sábado, los distintos sectores que integran Fuerza Patria mantuvieron reuniones con escasa tregua y crecientes fricciones. La posibilidad de una ruptura no solo estaba sobre la mesa, sino que fue evaluada con seriedad por cada uno de los espacios en disputa.
Desde el entorno de Alak incluso se había puesto en marcha una lista alternativa. Ese borrador, en caso de que no se alcanzara un consenso, ubicaba a Lucía Iañez al frente de la lista de diputados provinciales y a Sergio Resa, actual secretario de Planeamiento de la Municipalidad, como primer candidato a concejal. La nómina incluía también a otros funcionarios del gabinete local.
Las conversaciones se concentraron en la Casa de Gobierno provincial, con la participación de representantes de los sectores que integran la alianza oficialista. Con el correr de las horas se sumaron nuevos elementos de tensión, como la posibilidad de listas paralelas, versiones sobre pedidos de prórrogas y la falta de definiciones concretas.
A ese panorama se sumó un corte de energía en la sede de la Junta Electoral bonaerense, lo que dificultó aún más las gestiones finales. Aunque se pidió una prórroga para cerrar las listas, no hubo confirmación oficial de que la misma haya sido otorgada. Sin embargo, todo indica que hubo cierto margen de tolerancia para formalizar las candidaturas fuera del horario estipulado.
Una ingeniería electoral que busca contener las tensiones internas
La resolución en La Plata no es menor: en uno de los principales bastiones del peronismo bonaerense, la unidad entre los sectores que integran Fuerza Patria representa una apuesta a la estabilidad interna de cara a las elecciones del próximo 7 de septiembre. La continuidad de la fórmula Archanco–Iañez–Malpelli no solo implica una reedición de 2021, sino una estrategia que busca evitar fugas o internas que puedan debilitar el caudal electoral en una sección clave para la Legislatura provincial.
El cierre de listas también dejó en evidencia la necesidad de acuerdos forzados que, si bien resuelven coyunturalmente las candidaturas, no eliminan las tensiones de fondo entre los espacios que conviven dentro del armado oficialista. En ese contexto, la boleta que competirá en La Plata funciona como una síntesis de equilibrio, aunque frágil, en un escenario donde cada actor busca posicionarse para lo que viene.