La detención de Iván Tobar, referente de una de las facciones de la UOCRA La Plata, reactivó una investigación judicial que involucra amenazas, coacción y violencia sindical.
El hecho se enmarca en una disputa de poder dentro del gremio de la construcción, con antecedentes de enfrentamientos y maniobras de presión sobre empresarios y trabajadores.
El operativo y las pruebas que llevaron al arresto de Tobar
Tobar, quien también es conocido por su pasado en la barra brava de Estudiantes de La Plata, se entregó voluntariamente a la Justicia Federal y quedó detenido bajo los cargos de «amenazas agravadas y coacción». Su arresto fue ordenado por el juez federal Ernesto Kreplak, en el marco de una causa iniciada en 2021 por amenazas contra funcionarios judiciales vinculados al caso del exjefe gremial Juan Pablo «Pata» Medina.
La investigación se reactivó en los últimos días gracias a dos pruebas clave: un video viral de 2021 en el que se lanzaban amenazas contra el juez Alejandro Esmoris y el fiscal Rodolfo Molina, y la declaración de un exintegrante de la agrupación de Tobar que aportó información sobre los protagonistas de la filmación.
El peritaje confirmó que el paredón que aparece en el video pertenece a una propiedad de Tobar en Ensenada, lo que vinculó directamente al dirigente sindical con las amenazas. Además, la Justicia dispuso 25 allanamientos en distintas localidades del Gran La Plata, que permitieron incautar armas, cerca de 10 millones de pesos en efectivo, vehículos y documentación relevante para la causa.
Los bienes incautados en los allanamientos
El operativo judicial incluyó múltiples allanamientos en Tolosa, Ensenada y Berisso, donde se incautaron:
- Una escopeta calibre 16
- 43 teléfonos celulares y dispositivos electrónicos
- $9.801.000 en efectivo
- Un camión Ford F-350, dos autos y siete motos
- Documentación vinculada a propiedades y operaciones bancarias
Estos elementos refuerzan la hipótesis de una red de financiamiento vinculada a maniobras irregulares dentro del gremio.
El mensaje de su hijo y la reacción de su facción gremial
Tras la detención de Tobar, su hijo Santiago Tobar emitió un video en el que denunció que sectores rivales de la UOCRA estarían presionando a empresarios y trabajadores de la construcción en La Plata. Según su versión, la facción de «Puly» Medina estaría aprovechando la situación para expandir su influencia.
En paralelo, la Agrupación Blanca y Azul, liderada por Tobar, emitió un comunicado en el que acusó a la barra de Gimnasia y al entorno de Medina de «intentar tomar obras y extorsionar a empresarios». La disputa entre estos sectores dentro de la UOCRA ha sido constante en los últimos años, y la detención de Tobar reavivó las tensiones en la región.
El nexo con los incidentes en Gonnet
La investigación por la detención de Tobar se da en simultáneo con otro expediente que analiza los violentos enfrentamientos en la guardia del Hospital San Roque de Gonnet. En ese episodio, miembros de las barras de Estudiantes y Gimnasia se enfrentaron, dejando heridos a varios integrantes de ambos grupos.
El fiscal Gonzalo Petit Bosnic está a cargo de la causa y busca determinar si estos hechos tienen conexión con la interna gremial. En particular, se investiga si los enfrentamientos fueron una represalia relacionada con el control territorial en las obras de la región.
Lo que viene: la declaración de Tobar y el futuro del conflicto gremial
En las próximas horas, Tobar será indagado por el juez Kreplak. Su declaración podría definir el rumbo de la causa, mientras su defensa busca desestimar las pruebas en su contra y solicitar la excarcelación.
El conflicto dentro de la UOCRA La Plata parece lejos de resolverse. Con una historia de enfrentamientos y disputas por el poder, el futuro del gremio sigue siendo incierto, mientras la Justicia intenta desmantelar una estructura de violencia sindical que lleva años operando en la región.
