El gobernador bonaerense defendió el desdoblamiento electoral y llamó a militar con fuerza la elección provincial del 7 de septiembre. Se mostró conforme con el cierre de listas nacionales y destacó la candidatura de Jorge Taiana como parte de una estrategia con “perfil positivo”. La interna existió, pero “se resolvió puertas adentro”.
En plena recta final hacia los comicios provinciales, Axel Kicillof volvió a marcar la cancha. En una entrevista transmitida por streaming en Infobae, el gobernador bonaerense defendió el desdoblamiento electoral y dejó una frase que resume su estrategia: “Hay que ganar en octubre, pero septiembre es la posibilidad concreta de ponerle un freno a Milei”.
La decisión de separar la elección bonaerense del calendario nacional —que se celebrará el 7 de septiembre— fue interpretada como un movimiento táctico para evitar el arrastre de la boleta presidencial y reforzar el protagonismo territorial del peronismo. Kicillof lo explicó como una forma de “darle a la gente una alternativa sólida” frente a lo que considera una gestión nacional que “afecta de manera directa la vida cotidiana de los bonaerenses”.
En cuanto al cierre de listas nacionales, el mandatario se mostró “conforme” y destacó la postulación de Jorge Taiana como una elección estratégica: “Buscaba un perfil que me parecía interesante y positivo”. Aunque reconoció que hubo debates internos, evitó alimentar especulaciones: “Los pormenores son cosas que dirimimos internamente. No está mal discutir, pero hay que hacerlo puertas para adentro”.
La candidatura de Taiana, exministro de Defensa y referente histórico del peronismo, fue leída como un gesto de equilibrio entre experiencia y renovación. Kicillof evitó confrontar públicamente con otros sectores del espacio, pero dejó en claro que la unidad se construyó sobre consensos silenciosos.
Mientras Milei intensifica su campaña en territorio bonaerense con actos cargados de confrontación, el gobernador apuesta a mostrar gestión, territorialidad y cohesión interna. El 7-S será más que una elección provincial: será el primer test electoral que mida el pulso de la resistencia al modelo libertario.