Con una millonaria inversión para equipar a la Policía Bonaerense y modernizar comisarías, Axel Kicillof envió el Fondo de Seguridad en 58 municipios. ¿Será suficiente para frenar la inseguridad en la provincia? Descubrí los detalles de este ambicioso plan y las críticas que ya despierta.
En un contexto marcado por la creciente preocupación por la seguridad ciudadana, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, anunció este jueves la distribución de $28.600 millones a 58 municipios bonaerenses como parte de la primera cuota del Fondo de Fortalecimiento de la Seguridad.
Esta iniciativa, creada mediante el decreto N°371/2025 el pasado 18 de marzo, tiene como objetivo primordial equipar a la Policía Bonaerense, renovar infraestructura y financiar gastos operativos para combatir la inseguridad en la provincia. La medida se enmarca en un ambicioso Plan Integral de Seguridad Bonaerense, que contempla una inversión total de $170.000 millones para los 135 municipios de la región.
Un fondo para patrulleros, comisarías y tecnología
El Fondo de Fortalecimiento de la Seguridad busca dotar a los municipios de recursos concretos para mejorar la capacidad operativa de las fuerzas policiales. Según lo establecido, los $28.600 millones transferidos representan el 40% de un total de $71.500 millones destinados a este fondo, con futuras entregas previstas para los próximos meses. Los municipios adheridos podrán adquirir patrulleros, incorporar equipamiento tecnológico y realizar obras de infraestructura, como la refacción de comisarías, para optimizar las condiciones de trabajo de la policía.
Durante un acto reciente, Kicillof destacó la importancia de esta inversión: “Esta es una inversión provincial que ejecutarán cada uno de los distritos: trabajamos de forma coordinada porque nos votaron para que el Estado funcione mejor y brinde respuestas a las necesidades de nuestro pueblo”. El gobernador también subrayó que estas acciones no detendrán los reclamos ante la Corte Suprema por los fondos que, según él, el gobierno nacional “le robó” a la provincia, en referencia a un recorte de $750.000 millones que habrían sido destinados a seguridad.
Municipios beneficiados y alcance del plan
Entre los 58 municipios que recibieron esta primera cuota se encuentran Almirante Brown, Avellaneda, Bahía Blanca, Florencio Varela, General Pueyrredón (Mar del Plata), La Plata y Quilmes, entre otros. La distribución de los recursos prioriza a los distritos con más de 70.000 habitantes, aunque los municipios más pequeños, adheridos al Régimen de Policías Comunales, también recibirán un incremento significativo en sus fondos, que se triplicarán a partir de abril.
El plan no solo se centra en la adquisición de móviles policiales, sino que también incluye la incorporación de 750 nuevos patrulleros para la Policía provincial y la formación de 1.200 nuevos agentes, según anunció el gobierno bonaerense. Estas medidas buscan reforzar la presencia policial en los barrios y mejorar la prevención del delito en un contexto de tensiones sociales y económicas.
Críticas y desafíos pendientes
A pesar del impacto positivo que esta inversión podría generar, no han faltado críticas. Algunos sectores señalan que la distribución de fondos llega tarde, en un momento en que el sistema policial bonaerense enfrenta problemas estructurales, como la falta de capacitación, turnos sobrecargados y comisarías en condiciones precarias. Además, ciertos analistas han cuestionado la transparencia en el uso de los recursos, exigiendo una rendición de cuentas clara sobre cómo se ejecutarán las partidas en cada municipio.
Por otro lado, Kicillof ha insistido en culpar al gobierno nacional, liderado por Javier Milei, por los recortes presupuestarios que, según él, han agravado la situación. “Dicen explícitamente que quieren fundir a las provincias, pero esos recursos son el fruto del esfuerzo de los trabajadores bonaerenses”, afirmó el gobernador, reavivando la pulseada política con la Casa Rosada.
Un paso hacia adelante en un contexto complejo
La transferencia de $28.600 millones marca un hito en la gestión de Kicillof, quien busca posicionarse como un referente en la lucha contra la inseguridad en la provincia más poblada del país. Sin embargo, el éxito de esta iniciativa dependerá de la capacidad de los municipios para ejecutar los fondos de manera eficiente y de la coordinación entre las autoridades provinciales y locales.
Con más entregas previstas y un plan que abarca a todos los distritos bonaerenses, el Fondo de Fortalecimiento de la Seguridad se presenta como una herramienta clave para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. No obstante, en un año electoral, el desafío será demostrar que estas inversiones se traducen en resultados concretos y no en promesas de campaña.