María Eugenia Vidal endurece su mensaje: respalda reformas de Milei pero advierte al PRO sobre su identidad política.
La diputada nacional apoyó las reformas del presidente Javier Milei, pero reclamó que el PRO mantenga su perfil propio
En declaraciones recientes, María Eugenia Vidal se mostró a favor de las iniciativas económicas y políticas impulsadas por el Gobierno nacional, aunque lanzó una advertencia a su partido: “El PRO no necesita pintarse de violeta para apoyar al Gobierno”.
La exgobernadora bonaerense busca reposicionar al espacio amarillo en medio de la tensión por la relación con La Libertad Avanza.
Un respaldo condicionado a Milei
Vidal afirmó que “quiere que al presidente le vaya bien”, pero aclaró que eso no significa “sometimiento”. Reconoció que las reformas estructurales que impulsa Milei son necesarias, aunque insistió en que el PRO debe marcar límites y señalar aquello que considere negativo.
La diputada destacó que el mandatario “hizo un esfuerzo por dejar de insultar” y que ahora el desafío es transformar ese gesto en acuerdos reales. Sin embargo, subrayó que el PRO debe sostenerse como “una alternativa propia” y no diluirse en la identidad libertaria Data Diario.
El trasfondo político: encuestas y tensiones internas
Las declaraciones de Vidal coinciden con una encuesta de la Universidad de San Andrés (UDESA), que reveló que la mayoría de los consultados cree que el PRO debe “cooperar legislativamente sin sumarse al Gobierno”. Solo un 10% apoyó la idea de fusionarse con La Libertad Avanza.
Este dato refuerza la posición de Vidal, quien busca evitar que el partido amarillo pierda autonomía en un escenario de polarización entre kirchnerismo y mileísmo.
Un PRO fuerte y diferenciado
La exgobernadora bonaerense planteó que el PRO debe reconstruirse como fuerza política capaz de ofrecer una alternativa distinta al oficialismo libertario. “Hoy hay un clima de hacer todo lo que el Gobierno pida, pero también hay que construir una alternativa”, sostuvo.
En ese sentido, Vidal llamó a fortalecer la identidad partidaria y a evitar que el PRO se convierta en un apéndice de Milei. Su mensaje apunta tanto a la dirigencia nacional como a las bases, en un momento de redefinición estratégica tras la sangría de dirigentes que sufrió el macrismo en los últimos meses.
Lo que viene
El posicionamiento de Vidal abre un nuevo capítulo en la interna del PRO. Mientras algunos sectores se muestran más proclives a una alianza estrecha con Milei, otros —como la diputada— insisten en preservar la marca amarilla.
La discusión sobre el rumbo del partido se intensificará en las próximas semanas, en paralelo al debate legislativo de las reformas libertarias. El desenlace marcará si el PRO se consolida como socio subordinado o como actor político con voz propia en la nueva etapa.


