Este lunes, grúas y maquinaria pesada tomarán la esquina de Diagonal 77 para derribar el depósito que ardió en llamas y dejó al barrio en jaque. ¿Qué pasará con el terreno y los vecinos afectados? Una crónica desde el corazón de la ciudad.
La ciudad de La Plata se prepara para un operativo de gran envergadura: este lunes 28 de julio, a partir de las 10 de la mañana, se llevará a cabo la demolición controlada del depósito de electrodomésticos ubicado en Diagonal 77 y 48, que quedó gravemente comprometido tras un voraz incendio el pasado 16 de julio. La estructura, perteneciente a la firma Al Tecno S.A., funcionaba de manera clandestina, según confirmaron las autoridades municipales, y su colapso parcial generó conmoción en el centro platense.
Hoy, grúas y maquinaria pesada ya están en el lugar, preparando el terreno para un procedimiento que busca poner fin a una etapa de incertidumbre para los vecinos y comerciantes de la zona.
Un incendio que marcó a la ciudad
El fuego, que se desató en las primeras horas del 16 de julio, consumió durante más de cinco horas el depósito de cuatro pisos, dejando tras de sí un panorama desolador: calles cortadas, olor a quemado, comercios cerrados y un edificio lindero evacuado por el riesgo de derrumbe. Las llamas, alimentadas por electrodomésticos como heladeras, lavarropas y aires acondicionados, provocaron el colapso de la fachada del edificio, que alguna vez albergó una estación de servicio. Afortunadamente, no se reportaron víctimas, pero los daños estructurales fueron tan severos que la Justicia autorizó su demolición tras una evaluación técnica liderada por expertos de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).
El incendio, según las pericias preliminares, habría sido causado por un cortocircuito en una oficina de la planta baja, descartando por ahora la intervención de terceros. Sin embargo, la investigación judicial, a cargo del fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta, continúa para determinar responsabilidades, especialmente en torno a la falta de habilitación del depósito, que había sido clausurado por la Municipalidad el 25 de junio.
Preparativos para la demolición
Desde este mediodía, la esquina de Diagonal 77 y 48 es un hervidero de actividad. Grúas y camiones de gran porte, pertenecientes a la empresa Grupo Mitre, líder en demoliciones y reciclaje con más de 40 años de experiencia, han tomado la zona. Los cascos blancos de los operarios y el movimiento de maquinaria pesada marcan el inicio de los preparativos para el operativo del lunes, que promete ser uno de los eventos urbanos más relevantes de La Plata en los últimos años. La empresa, radicada en Munro, provincia de Buenos Aires, fue seleccionada por la Municipalidad tras un proceso de evaluación de propuestas, en el que ingenieros de la UNLP jugaron un rol clave para garantizar la seguridad y viabilidad del procedimiento.
La zona, que permanece vallada y custodiada por personal policial y de Defensa Civil, refleja las secuelas del siniestro: el olor a quemado persiste, los comercios aledaños enfrentan una parálisis económica y los vecinos aún no han podido regresar a sus hogares. Un edificio multifamiliar contiguo, de ocho pisos, sigue inhabilitado, y su estabilidad estructural está bajo análisis, lo que suma un desafío adicional al operativo.
Voces de la comunidad y expectativas
“Es un alivio que finalmente vayan a demolerlo, pero también da miedo. Nadie quiere otro susto como el del incendio”, comentó Ana, una vecina de la zona que vivió la evacuación del 16 de julio. Los comerciantes, por su parte, esperan que la demolición reactive la circulación en el área, afectada desde hace más de una semana. “Necesitamos volver a trabajar. Esto nos está matando”, expresó Juan, dueño de un local cercano.
El operativo no solo busca eliminar el riesgo de un colapso espontáneo, sino también abrir un nuevo capítulo para el lote afectado. Sin embargo, persisten interrogantes sobre el futuro del terreno y las responsabilidades municipales y empresariales en torno al funcionamiento irregular del depósito.
Un operativo bajo la lupa
La demolición, programada para media mañana del lunes, será supervisada por expertos en estructuras y demoliciones urbanas, dado el entorno densamente poblado del centro platense. La prioridad es evitar daños a las propiedades linderas, especialmente al edificio evacuado, cuya integridad sigue siendo una preocupación. Las autoridades han prometido un procedimiento preciso, con el apoyo de maquinaria especializada y un equipo técnico altamente calificado.
Mientras La Plata se prepara para este evento, las cámaras de los medios locales, junto con los ojos de los vecinos, estarán atentos al desarrollo del operativo. La demolición no solo cerrará una herida abierta en el corazón de la ciudad, sino que también pondrá a prueba la capacidad de las autoridades para gestionar una crisis que, de milagro, no terminó en tragedia.