Según informó Octavio “Tato” Miloni, secretario general de ADULP, la medida será sin asistencia a los lugares de trabajo, lo que implica una paralización total de las actividades académicas en la UNLP durante los dos días mencionados. Además, se anticipan actividades de visibilización, como clases públicas y asambleas, para difundir el reclamo entre la comunidad.
La Universidad Nacional de La Plata (UNLP) enfrentará una interrupción en sus actividades académicas los próximos 11 y 12 de junio, tras la confirmación de la adhesión de la Asociación de Docentes de la UNLP (ADULP) al paro nacional de 48 horas convocado por la Federación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU). Esta medida de fuerza, que afectará a facultades y colegios dependientes de la casa de estudios platense, responde a un reclamo sostenido por mejoras salariales, paritarias libres y un mayor presupuesto para el sistema universitario público, en un contexto de ajuste económico impulsado por el gobierno nacional.
Un paro con alta adhesión y un mensaje claro
La decisión de ADULP de sumarse al paro fue anunciada tras el plenario de secretarios generales de CONADU, donde se resolvió intensificar las medidas de fuerza ante la falta de respuestas del gobierno a las demandas del sector. Según informó Octavio “Tato” Miloni, secretario general de ADULP, la medida será sin asistencia a los lugares de trabajo, lo que implica una paralización total de las actividades académicas en la UNLP durante los dos días mencionados. Además, se anticipan actividades de visibilización, como clases públicas y asambleas, para difundir el reclamo entre la comunidad.
El paro se enmarca en un plan de lucha más amplio, que incluye una nueva Marcha Federal Universitaria programada para la segunda quincena de junio, en conmemoración del primer aniversario de la movilización de 2024. “La situación en las facultades y colegios es crítica. Los docentes no podemos seguir trabajando en estas condiciones, con salarios que no alcanzan y un presupuesto universitario que no garantiza el funcionamiento de las instituciones”, expresó Miloni en una reciente entrevista en Contacto Universitario por Radio Universidad.
Reclamos que resuenan en todo el país
El conflicto universitario no es exclusivo de La Plata. CONADU, que nuclea a gremios como ADULP y otras asociaciones docentes de universidades nacionales, ha denunciado que los salarios de los trabajadores del sector han perdido poder adquisitivo desde diciembre de 2023, y que las paritarias no han logrado establecer un piso que permita recuperar el valor real de los ingresos frente a la inflación. Además, el ajuste presupuestario impulsado por el gobierno de Javier Milei ha generado preocupación sobre la sostenibilidad de las universidades públicas, especialmente en instituciones medianas y pequeñas.
Carlos De Feo, secretario general de CONADU, señaló: “Es imperioso que el Congreso dé respuesta a los reclamos del sector educativo. Necesitamos una recomposición salarial urgente y un presupuesto que garantice la continuidad de la educación pública”.
En este sentido, el proyecto de Ley de Financiamiento Educativo Universitario, presentado recientemente ante el Congreso, busca establecer una recomposición de los salarios perdidos y asegurar que las futuras negociaciones paritarias superen la inflación.
Impacto en la UNLP y antecedentes recientes
La adhesión de ADULP al paro de CONADU no es un hecho aislado. Durante mayo, la UNLP ya había enfrentado interrupciones en el dictado de clases debido a medidas de fuerza similares. Por ejemplo, el 23 de mayo, docentes y no docentes nucleados en ADULP y ATULP (Asociación de Trabajadores de la UNLP) paralizaron las actividades en reclamo de mejoras salariales y mayor financiamiento. Según reportes de la época, la adhesión alcanzó el 90% entre los docentes y el 97% entre los no docentes, lo que evidencia el fuerte respaldo a estas medidas.
La comunidad universitaria platense también participó activamente en la Marcha Federal Universitaria del 28 de mayo, una movilización que reunió a docentes, no docentes y estudiantes en defensa de la educación pública. Esta acción se suma a un calendario de protestas que incluyó clases públicas, pintadas y asambleas, todas destinadas a visibilizar el deterioro del sistema universitario.
Una semana clave para el futuro universitario
La confirmación del paro de los días 11 y 12 de junio marca el inicio de una semana crítica para la UNLP. Además, CONADU ya anticipó otra medida de fuerza de 48 horas entre el 23 y 27 de junio, lo que podría extender las interrupciones en el calendario académico. Estas acciones se desarrollan en un contexto de creciente malestar, no solo en La Plata, sino en universidades de todo el país, donde los gremios advierten que el conflicto podría escalar si no hay avances en las negociaciones con el gobierno.
“La universidad pública está en crisis porque los trabajadores no podemos llevar adelante nuestras tareas dignamente. El alto acatamiento a las medidas demuestra el ánimo de la comunidad universitaria frente a este escenario crítico”, afirmó Miloni, destacando la unidad entre docentes, no docentes y estudiantes en esta lucha.