Tras la derrota legislativa de Fuerza Patria, el ministro bonaerense Andrés “Cuervo” Larroque responsabilizó a Donald Trump por el triunfo libertario, cuestionó el rol de Cristina Kirchner y planteó que el peronismo debe acelerar el recambio dirigencial rumbo a 2027.
El resultado adverso de Fuerza Patria en las elecciones legislativas nacionales dejó al descubierto tensiones internas en el peronismo. Andrés “Cuervo” Larroque, ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense y dirigente de peso en el armado territorial, fue uno de los primeros en ponerle palabras al malestar. Según sostuvo, la victoria de La Libertad Avanza no puede entenderse sin la influencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a quien atribuyó un rol decisivo en el respaldo internacional al espacio libertario.
Cristina en el centro del debate
Más allá de la lectura geopolítica, Larroque apuntó directamente a la conducción interna del peronismo. En declaraciones públicas, pidió “humildad” a Cristina Kirchner, a quien reconoció como figura central pero también como un obstáculo para la renovación.
“El peronismo necesita abrir una transición de liderazgo que nos permita llegar competitivos a 2027”, remarcó, en un mensaje que sacudió al kirchnerismo duro y reavivó la discusión sobre el futuro de la exvicepresidenta.
El llamado a la transición
Para Larroque, la derrota no debe ser leída solo como un traspié electoral, sino como una señal de agotamiento de un ciclo político. En ese sentido, planteó la necesidad de acelerar un recambio generacional y dirigencial que permita al peronismo reconstruirse como alternativa frente al avance libertario. “No alcanza con resistir, hay que animarse a construir algo nuevo”, deslizó, en un claro mensaje hacia la militancia y los gobernadores.
Un peronismo en busca de rumbo
Las palabras del ministro bonaerense se suman a un clima de autocrítica que atraviesa al movimiento tras la derrota. Mientras algunos sectores insisten en sostener el liderazgo de Cristina Kirchner como referencia indiscutida, otros —como Larroque— empujan por un reordenamiento que abra paso a nuevas figuras con proyección hacia 2027.
El debate recién comienza, pero la intervención del “Cuervo” dejó en claro que la discusión sobre el futuro del peronismo ya no puede postergarse.


