Mayra Mendoza y Mariel Fernández convocaronn a intendentes de todo el país para respaldar a CFK tras la condena de la Corte Suprema. Con Kicillof en el centro de la escena, el peronismo busca una “foto potente” de cara a las elecciones 2025. ¿Lograrán frenar las tensiones internas?
Intendentes peronistas de todo el país se reunirán este sábado en la sede del Partido Justicialista (PJ) en Buenos Aires para respaldar a Cristina Fernández de Kirchner (CFK). La convocatoria, liderada por las intendentas Mayra Mendoza (Quilmes) y Mariel Fernández (Moreno), tiene como objetivo armar una “foto potente” que consolide el apoyo a la ex presidenta tras la ratificación de su condena en la causa Vialidad por parte de la Corte Suprema. Este gesto, además, pone en pausa –al menos temporalmente– las tensiones internas entre el kirchnerismo y el sector liderado por el gobernador bonaerense, Axel Kicillof.
Una respuesta frente a la adversidad judicial
La reunión en la histórica sede de la calle Matheu llega en un momento crítico para el peronismo. La confirmación de la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para cargos públicos de Cristina Kirchner ha reconfigurado el mapa político en un año electoral. La ex mandataria, quien anunció su candidatura a diputada provincial por la tercera sección electoral bonaerense antes del fallo, no podrá competir, lo que desató una ola de reacciones dentro del PJ.
Mayra Mendoza, una de las figuras clave de La Cámpora y cercana a CFK, fue contundente en su defensa: “No quieren competir con Cristina en las urnas, porque tienen claro que el pueblo no olvida los años donde vivir mejor no era un privilegio”. Sus palabras, pronunciadas en los últimos días, reflejan el tono de resistencia que el kirchnerismo busca imprimir a esta movilización.
Por su parte, Mariel Fernández, intendenta de Moreno, se sumó a la organización de la cumbre, invitando a jefes comunales de todo el país. La coordinación también contó con el aporte de Teresa García, secretaria general del PJ y jefa del bloque de senadores bonaerenses de Unión por la Patria (UP). Según fuentes consultadas, la mayoría de los intendentes bonaerenses alineados con Cristina confirmaron su asistencia, mientras que los cercanos a Kicillof también dirán presente, aunque con matices.
Kicillof, entre el respaldo y la negociación
El gobernador Axel Kicillof, líder del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), se encuentra en una posición delicada. Si bien ha manifestado su apoyo a CFK –incluso asistiendo a un acto del PJ el pasado lunes en su respaldo–, las tensiones con el kirchnerismo persisten. La interna en la provincia de Buenos Aires, donde Kicillof busca consolidar su liderazgo, se ha visto marcada por diferencias en el armado electoral y la estrategia legislativa.
El lunes, Kicillof reunió en La Plata a más de 40 intendentes del MDF para discutir el rumbo electoral y negociar un posible acuerdo con el sector cristinista. Sin embargo, la ausencia del gobernador en algunas cumbres del PJ y los “besos congelados” con figuras como Mendoza y Fernández durante encuentros previos reflejan un clima de desconfianza. A pesar de esto, fuentes cercanas al mandatario aseguran que asistirá a la reunión del sábado, en un gesto que busca evitar fracturas en un momento donde la unidad es clave.
“Axel hizo lo que tenía que hacer”, señaló un dirigente kicillofista, destacando el respaldo público del gobernador a CFK. Sin embargo, el MDF insiste en que cualquier acuerdo con el kirchnerismo debe incluir un apoyo explícito a la gestión provincial y una coordinación legislativa que no genere cortocircuitos.
Una “foto potente” con proyección electoral
La reunión del sábado no solo busca ser un acto de desagravio a Cristina Kirchner, sino también una señal de fortaleza del peronismo de cara a las elecciones legislativas del 7 de septiembre y el 27 de octubre. La presencia de intendentes de todo el país, junto a figuras como Máximo Kirchner, Sergio Massa y Juan Grabois, apunta a proyectar una imagen de cohesión en un momento donde el oficialismo libertario, liderado por Javier Milei, enfrenta crecientes cuestionamientos por la crisis económica.
Además, el PJ planifica una serie de acciones para los próximos días. El lunes se reunirá con sectores de la juventud peronista, el martes con gobernadores de Unión por la Patria, y el miércoles se espera una movilización masiva desde la casa de CFK en el barrio de Constitución hasta los tribunales de Comodoro Py, donde la ex presidenta se presentará para cumplir con la orden judicial de detención.
La interna, en pausa pero latente
Aunque la reunión del sábado logrará una tregua temporal, la interna peronista está lejos de resolverse. Intendentes como Fernando Espinoza (La Matanza) y Mario Secco (Ensenada), alineados con Kicillof, han expresado su respaldo a CFK, pero también defienden la autonomía del MDF. Por otro lado, Mendoza y Patricio Mussi (Berazategui) refuerzan el liderazgo de Cristina en la tercera sección electoral, donde la ex presidenta buscaba competir.
El peronismo bonaerense, epicentro de esta cumbre, sabe que la unidad es una condición necesaria para enfrentar al oficialismo en 2025. Sin embargo, las diferencias entre el cristinismo y el kicillofismo –sumadas a las aspiraciones de otros sectores como el massismo– anticipan que la “pausa” en la interna será breve. Como señaló un dirigente a Infobae, “hasta que Cristina no sepa si va a cumplir la condena en su casa, vamos a estar en la calle”.
En un año electoral marcado por la polarización y la crisis, el PJ apuesta a transformar la adversidad judicial de CFK en una oportunidad política. La reunión del sábado será el primer paso para medir si esa apuesta logra consolidarse o si las fisuras internas reaparecen con más fuerza.