El líder del Frente Renovador rechazó fracturas en el espacio que enfrenta a Milei y puso el foco en la cohesión tras el anuncio del gobernador bonaerense. “No me rompan las pelotas”, habría dicho Massa, según reveló Galmarini, dejando en claro su hartazgo frente a las discusiones que desvían el foco de la batalla política central.¿Resistirá el peronismo las tensiones internas?
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, anunció el desdoblamiento de las elecciones legislativas provinciales, una decisión que generó repercusiones inmediatas en el arco opositor. En este contexto , Sebastián Galmarini, referente del Frente Renovador y director del Banco Provincia, salió al cruce para destacar la importancia de mantener la cohesión dentro del principal espacio que enfrenta al gobierno de Javier Milei.
Sus declaraciones no solo reflejan la postura del sector liderado por Sergio Massa, sino que también exponen las internas y los desafíos que atraviesa la oposición en un año clave.
Galmarini, con su habitual tono directo, subrayó que la prioridad del Frente Renovador es consolidar una estrategia unificada para contrarrestar las políticas del oficialismo. “Massa insiste en mantener la unidad porque la prioridad es enfrentar el gobierno de Milei”, afirmó el exsenador provincial en una entrevista radial esta mañana.
Según sus palabras, el ex candidato presidencial no solo rechaza cualquier atisbo de ruptura, sino que se muestra visiblemente irritado ante las especulaciones sobre candidaturas individuales dentro del espacio. “No me rompan las pelotas”, habría dicho Massa, según reveló Galmarini, dejando en claro su hartazgo frente a las discusiones que desvían el foco de la batalla política central.
El anuncio de Kicillof, que implica separar los comicios bonaerenses de los nacionales, fue interpretado por Galmarini como una jugada legítima dentro del peronismo. “Kicillof se cansó de ser manipulado por Cristina y tomó la decisión de desdoblar las elecciones, y me parece bien y justo”, sostuvo, al tiempo que destacó que esta movida no debería fracturar la alianza opositora. Para el referente massista, la autonomía electoral de la provincia puede ser una oportunidad para fortalecer la posición del peronismo y sus aliados, siempre y cuando se preserve un frente común.
Las palabras de Galmarini llegan en un momento de definiciones. El desdoblamiento electoral, que ya genera debates en redes sociales y medios de comunicación, podría alterar el calendario político y obligar a los partidos a ajustar sus estrategias. En este sentido, el Frente Renovador parece decidido a evitar dispersiones internas que debiliten su capacidad de respuesta frente a un gobierno libertario que, a pesar de sus controversias, mantiene una base de apoyo significativa.
La crónica de este martes no solo pone de relieve la postura de Sergio Massa y su entorno, sino que también evidencia las tensiones latentes en el peronismo tras años de liderazgos cruzados y disputas de poder. Mientras Kicillof avanza con su plan electoral, el mensaje del Frente Renovador es claro: la unidad no es negociable. “Lo que tenemos que hacer es enfrentar a Milei, no perdernos en peleas internas”, insistió Galmarini, dejando entrever que el camino hacia las urnas estará marcado por una oposición que, al menos en el discurso, busca mostrarse sólida y coordinada.
Con el reloj político en marcha, el desdoblamiento de las elecciones bonaerenses promete ser uno de los temas centrales de la agenda en las próximas semanas. La pregunta que queda en el aire es si el Frente Renovador logrará sostener esa unidad que tanto pregona o si las ambiciones individuales terminarán por imponerse. Por ahora, Massa y sus aliados cierran filas, con un mensaje que resuena fuerte: el enemigo está afuera, no adentro.