El presidente Javier Milei despejó una de las principales incógnitas políticas de las últimas semanas: no vetará el Presupuesto 2026 aprobado en la Cámara de Diputados, aun con las modificaciones impulsadas por la oposición. En cambio, ratificó que el Gobierno garantizará el equilibrio fiscal mediante una readecuación interna de gastos, sin recurrir a nuevos impuestos.
Las definiciones llegaron en una serie de entrevistas televisivas en las que el mandatario abordó el escenario parlamentario, defendió el rumbo económico, opinó sobre la política regional y volvió a proyectar un fuerte descenso de la inflación hacia mediados de 2026.
Presupuesto sin veto y ajustes puertas adentro
El proyecto de ley de leyes avanzó en Diputados con cambios relevantes: se mantuvieron los fondos para el financiamiento universitario y las leyes de emergencia en discapacidad, artículos que el oficialismo buscaba derogar para blindar el déficit cero. La exclusión del Capítulo XI fue leída en la Casa Rosada como un revés político, pero Milei descartó cualquier veto.
“El Presupuesto está construido sobre la base del déficit cero”, insistió el Presidente, y explicó que el Ejecutivo avanzará con reasignaciones de partidas dentro del propio esquema aprobado. “Si no se consigue por un lado, se corrige por otro. Siempre sin subir impuestos”, remarcó.
El texto ahora será debatido en el Senado, donde el Gobierno apuesta a convertirlo en ley sin introducir nuevas modificaciones.
Balance económico y señales al mercado
En materia económica, Milei volvió a defender los resultados de su gestión. Aseguró que la pobreza cayó del 57% al 27% y calificó esa baja como “un logro espectacular”. Frente a las críticas por la caída del consumo y el cierre de empresas, sostuvo que el análisis debe hacerse sobre el agregado: “Cambian los precios relativos, se destruyen actividades en algunos sectores y se crean en otros. En el neto, la economía está mejor”.
También confirmó que el Gobierno afrontará sin sobresaltos el vencimiento de deuda del 9 de enero, por más de 4.300 millones de dólares. Según detalló, el Tesoro ya cuenta con gran parte del efectivo necesario y con ofertas de financiamiento tipo REPO por unos 7.000 millones de dólares.
Inflación y proyecciones
Respecto al proceso inflacionario, el Presidente reiteró que espera que a mediados de 2026 el índice mensual comience “con cero”. Reconoció la suba del 2,5% registrada en noviembre, pero la atribuyó a la incertidumbre política previa a las elecciones. Como respaldo, mencionó la baja del riesgo país y la estabilidad cambiaria pese a una salida de capitales que estimó en unos 41.000 millones de dólares desde abril.
Caso $Libra y respaldo a funcionarios
Milei también se refirió al caso de la criptomoneda $Libra y negó que haya existido una estafa. Sostuvo que se trató de una inversión de riesgo asumida de manera voluntaria y señaló que en Estados Unidos se liberaron los bienes del principal involucrado. De todos modos, admitió que se arrepiente de haber promovido públicamente el proyecto.
En el plano interno, defendió al titular de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), Andrés Vázquez, cuestionado judicialmente por presuntas inconsistencias patrimoniales. “Es uno de los mayores especialistas en estructura impositiva del país. Las causas abiertas no son condenas”, afirmó.
Política regional, AFA y definiciones personales
En política exterior, el Presidente endureció su discurso contra Nicolás Maduro, a quien volvió a calificar como un dictador que “daña a toda América Latina”, y expresó su deseo de que Venezuela recupere la convivencia democrática. Evitó, en cambio, polemizar con otros mandatarios de la región.
Sobre la Asociación del Fútbol Argentino, Milei fue tajante: dijo que no intervendrá y que cualquier irregularidad debe resolverse en la Justicia. También se refirió al estado de salud de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner y le deseó una pronta recuperación, marcando un límite entre la confrontación política y las cuestiones personales.
Finalmente, volvió a plantear un horizonte acotado para su carrera política: aseguró que gobernará cuatro u ocho años y luego se retirará de la vida pública. “El programa se propuso, se está ejecutando y la evaluación final la hará la gente”, concluyó.


