Después de ser una de las novedades que ofreció la política platense en las elecciones a intendente de 2015, el economista Leandro Amoretti vuelve a postularse como candidato a concejal por un frente de agrupaciones opositoras. En este cuestionario su mirada de la ciudad y las principales ideas con las que su grupo pretende acceder a una banca.

-¿Cuál es el principal problema del cual ocuparse en La Plata?

-Desde una  visión estructural y de largo plazo, el principal problema es la segregación social y urbana que impone el actual modelo de ciudad. Vivimos en una ciudad gobernada por el lucro y la ganancia de pocos, que avanza sobre derechos, en particular el derecho al hábitat, y que profundiza las diferencias entre clases sociales. Claro que este modelo no comenzó con Julio Garro, hay puntos de continuidad y profundización respecto a la gestión de (Pablo) Bruera. Incluso en la actualidad las desigualdades se vuelven más violentas con el incremento de la desocupación y la pobreza en la región.

-¿Qué propuestas tiene para solucionarlo?

-En primer lugar proponemos llevar adelante un debate serio, amplio, cargado de argumentos y de ideas, que incluya a los diferentes protagonistas de la ciudad. Es urgente debatir el modelo de ciudad que queremos y su proyección a largo plazo. Un buen punto para comenzar es el ordenamiento urbano y el rol de mercado inmobiliario. Para VAMOS es central trabajar por el derecho a la ciudad, el cual integra un conjunto de derechos que hacen a la dignidad y a la posibilidad de disfrutar la vida en la ciudad.

-¿Qué estrategias debiera darse la Ciudad para generar empleo?

-Desde nuestra perspectiva el municipio debería trabajar junto a las organizaciones sindicales y los movimientos sociales defendiendo los derechos de los trabajadores e impulsando la intervención del estado en la economía, incluso creando empresas estatales. No obstante nos encontramos ante elecciones legislativas y debemos focalizarnos en proyectos. Vamos a trabajar para avanzar en un programa de obra pública barrial, protagonizado por los propios vecinos, mediante el cual se construyan veredas y cloacas en las zonas más humildes. Hemos estimado que con aproximadamente 800 millones de pesos se pueden crear 5.000 puestos de trabajo.

-¿Cómo incentivaría a los sectores productivos?

Es necesario generar un trabajo conjunto entre el Estado, las organizaciones sindicales, los empresarios y la universidad. No coincido con la idea de que para incentivar la producción simplemente hay que reducirle los costos a las empresas, como por ejemplo mediante parques industriales. Para impulsar a los sectores productivos de la región es importante garantizar desarrollo tecnológico, impulsar valor agregado y hacer uso de las economías de aglomeración de nuestra región. Con esto último me refiero a las condiciones particulares de nuestra ciudad, respecto a la disponibilidad de trabajo, la cercanía a los centros de consumo más importantes del país, de los puertos de exportación, la disponibilidad de espacio y la presencia de un centro de desarrollo tecnológico y científico como es la Universidad Nacional de La Plata. En síntesis, es imprescindible la articulación de los diferentes actores, la planificación productiva coordinada desde el estado y jerarquización de la tecnología y la producción con valor agregado intensiva en mano de obra.

-¿Con qué propuestas desarrollaría políticas de contención para la pobreza?

Las políticas de contención de la pobreza deben ser circunstanciales. Nunca debemos perder el objetivo de la inclusión y el empleo. Por eso es complejo debatir este tema sólo desde el ámbito municipal. Concretamente proponemos la regulación de los precios de los alimentos por parte del mercado regional de La Plata, transparentando su administración e incorporando productores a su región. Asimismo planteamos la necesidad de su descentralización a la zona sur y oeste de la ciudad. A futuro pensamos en la constitución de mercados estatales de alimentos. En segundo lugar planteamos, y de ingresar al concejo lo vamos a debatir, la insuficiencia del presupuesto municipal a los comedores comunitarios.

 -¿Cómo abordaría el déficit habitacional?

En la ciudad se da una tendencia que se corresponde con otras grandes ciudades, pero quizás de una forma más violenta: crecen las construcciones de propiedades al mismo tiempo que aumentan las de villas de emergencia y asentamientos. Vivimos un proceso de concentración de la propiedad urbana y de inquilinización. En promedio, en los últimos 15 años se duplicó el valor en dólares del m2 residencial en la ciudad. Es evidente que en el mercado del suelo no funciona la teoría de la oferta y la demanda. Se da la particularidad de que la tierra no se puede reproducir. En consecuencia los inversionistas que comprenden este proceso y tiene capacidad lobby o de acceder a información privilegiada logran captar una enorme renta urbana. Nosotros proponemos recuperar esa renta extraordinaria a través de un impuesto al plusvalor de la tierra y otra a la vivienda ociosa para impulsar una serie de propuestas de intervención. Entre las más importantes destacamos la creación de un banco municipal de tierras y una inmobiliaria municipal; un plan público de construcción de viviendas con créditos accesibles; y la urbanización e integración de las 120 villas de emergencia y asentamientos de la ciudad.

-¿Cómo califica el servicio que prestan las empresas Edelap, Camuzzi y Absa?

-En nuestra opinión brindan un servicio muy deficiente. Hay tres elementos que son claramente cuestionables: las tarifas excesivas; la escasa inversión que requiere la ciudad por su propio crecimiento; y en el caso de ABSA la falta de reparación de las pérdidas de agua. La consecuencia de la actual situación es la falta de servicio en los barrios más humildes. Las empresas operan bajo un criterio de rentabilidad, entonces en los barrios donde la ganancia es relativamente menor el servicio no importa. Vale la pena recordar que son empresas monopólicas por lo que tienen mucho poder para determinar condiciones. Lamentablemente el Estado no controla a las prestatarias, y en el caso particular del municipio la figura de la defensoría ciudadana ha perdido toda seriedad. Desde nuestro espacio proponemos la estatización en el caso de EDELAP y Camuzzi y la constitución de organismo públicos de control incuestionables.

-¿Qué modificaciones incorporaría al Código de Ordenamiento Urbano?

-El actual COU carece de toda legitimidad por lo que es necesario derogarlo y discutir uno nuevo, uno que sea democrático, sustentable e inclusivo. El nuevo código debería pensar de forma planificada el crecimiento de la ciudad, y en ese sentido debería determinar zonas residenciales, comerciales y productivas. El debate debe darse bajo una perspectiva de derechos, en defensa del derecho al hábitat y el patrimonio arquitectónico y cultural, y dejando de lado la especulación inmobiliaria. En concreto, pensamos que se debe regular y limitar a algunas zonas específicas el crecimiento en altura de los edificios, incluso pensamos en nuevas zonas residenciales destinadas a ese fin. Y también entendemos que se deben incorporar requisitos de alta exigencia en los criterios de factibilidad de las nuevas construcciones.

-¿Qué habría que hacer para solucionar los conflictos que plantea el tránsito?

-El tránsito en la ciudad se ha vuelta una tragedia silenciosa. Pero como no hay un grupo específico afectado se ha naturalizado sin que ninguna gestión asuma los costos. Es urgente implementar medidas estrictas de control para el cumplimiento de las normas viales y a la vez impulsar una fuerte campaña de concientización. Respecto al tránsito y a la congestión vehicular el mejor camino es perfeccionar el servicio de transporte público y la utilización de bicicletas.

-¿Cómo considera que debe ser la gestión del transporte público y qué modificaría para que sea más eficiente?

-En la actualidad la gestión del transporte se encuentra organizada bajo un criterio de rentabilidad, lo que implica baja frecuencias y una cobertura deficiente. Para revertir esta situación en primer lugar hay transparentar los contratos de concesión de las líneas municipales,  y en los casos las empresas no cumplan con sus obligaciones, que de seguro deben ser todas, rescindir el contrato. Desde nuestra visión el servicio de transporte debe estar en manos del Estado, ya que este es quien lo financia mediante subsidios. Desde esta óptica, proponemos la re planificación del servicio, avanzar en su descentralización e implementar el boleto combinado.

-¿Cuál cree que es la mejor opción para la llegada del tren eléctrico a La Plata? (soterramiento, paso a nivel, otro…)

-Es un debate complejo ya que implica un volumen elevado de recursos, por su financiamiento, y por la determinación de un proceso de valoración residencial. Sin embargo creo que debemos pensar en el largo plazo y lo más conveniente es el soterramiento y así evitar la división urbana que generan las vías.

-¿Conoce el proyecto del nuevo sistema de recolección de residuos? ¿Qué opina?

-Para el año 2017 aproximadamente el 20% de los recursos del municipio se destinan al pago del servicio de recolección de residuos. La nueva licitación implica un juego de intereses muy importante, por un período de al menos 8 años. En nuestra opinión es importante evaluar un proceso progresivo de municipalización del servicio para reducir las erogaciones que implica su tercerización. Asimismo acompañamos el reclamo y la propuesta del Movimiento de los Trabajadores Excluidos respecto la incorporación de los carreros y cartoneros en el nuevo esquema.

-¿Cómo ve la evolución de las obras hidráulicas? ¿Cree que La Plata está hoy a salvo de una inundación como la de 2013?

-Las obras avanzan pero lo hacen con lentitud, e incluso hay 12 obras paralizadas y 4 sin licitar. No obstante creo que la presión social, por parte de las asambleas de inundados y del conjunto de la sociedad, va a garantizar su finalización. Ahora, respecto a una posible inundación, en mi opinión además de las obras y de un plan de contingencia y alerta temprana, debemos repensar la capacidad de absorción de las nuevas construcciones, estableciendo mediante una ordenanza nuevos reservorios de agua (en edificios) y la modificación de superficies impermeables como por ejemplo veredas absorbentes.

-¿Aprueba el sistema actual de cooperativas para la prestación de servicios? ¿Qué haría en ese aspecto?

Está lejos de ser el sistema de empleo ideal, pero creo que tiene aspectos positivos respecto al trabajo particular de algunas cooperativas. Desde ya que los salarios de $4.000 son insuficientes y ese es el primer punto a revisar.

-¿Qué haría con la denominada “zona roja” de la ciudad?

En primer lugar hay dejar la hipocresía de lado y evitar de perseguir a las chicas que se prostituyen. La zona roja existe y se mantiene por un sector de la sociedad que consume prostitución. En perspectiva, creo que el Estado debería garantizar puestos de trabajo y emprendimientos productivos para que ninguna mujer se deba prostituir. Luego ante la situación de conflictividad y persecución policial entiendo que el mejor camino es trabajar conjuntamente con las organizaciones representativas de las mujeres que se prostituyen, para así aislar a los proxenetas y establecer canales de diálogo y posibles acuerdos.

-¿Qué opina de la policía local?

La policía local es un proyecto frustrado. No ha aportado en nada a la ciudad.  Claro es un debate de carácter provincial el cual se debe abordar en una discusión más general de las fuerzas de seguridad. Nosotros pensamos que se debe avanzar en la policía judicial, quitándole funciones a la bonaerense y re direccionando recursos hacia el gasto social.

-¿Cómo se podría mejorar la seguridad desde el municipio?

En la ciudad hay que dar un debate respecto al control territorial, tenemos que poner en tensión las estructuras de poder que influyen en los barrios. Hay que generar nuevas articulaciones entre el estado y las instituciones locales, y a la vez desmantelar los acuerdos en sectores del estado corrompidos y el crimen organizados. En ese camino proponemos crear un observatorio de seguridad para generar información seria y de ese modo planificar políticas públicas en la materia.

-¿En qué tema considera que usted puede aportar más como concejal?

A mí me toca este lugar, pero en verdad formo parte de un colectivo, de un frente electoral integrado por diferentes organizaciones (Patria Grande, Movimiento Justicia y Libertad, Unión del Pueblo, Movimiento Popular La Dignidad, Surcos, Democracia Socialista y Frente Amplio Vecinal Platense) las cuales tiene mucha fuerza y trabajo en el territorio. En ese sentido nuestro espacio podría aportar en debates, propuestas desde un enfoque de derechos y con experiencias concretas. De ingresar al Concejo no queremos sólo una tribuna para ganar espacio mediático, nos proponemos dar las peleas necesarias por avanzar en ordenanzas que transformen la realidad de la ciudad, y para eso estamos dispuestos a construir consenso adentro y por sobre todo desde afuera del concejo.

EL BOLETIN DE CALIFICACIONES

Infoplatense pidió a los candidatos que califiquen de 1 a 10 en distintas áreas de su actividad pública a varios actores de la política local, provincial y nacional. El siguiente es el boletín  firmado por Leandro Amoretti.